Luz Casal: "Hay gente que tiene ganas de tocarme para saber que estoy bien"

Luz Casal está "estupenda" y "recuperada" del tratamiento de cáncer de mama al que se sometió. Ahora, con disco nuevo, Vida tóxica, dice, en una entrevista con Efe, que vuelve a la carretera porque: "hay mucha gente que tiene ganas de tocarme para saber que estoy bien".

Fue el 26 de enero cuando anunciaba que tenía que posponer su gira de conciertos porque había sido operada de urgencia; cinco meses después terminaba un tratamiento "mezcla de veneno y toxicidad", y ahora, con las pilas cargadas, defiende su nuevo trabajo como siempre, con pasión.

El 12 de enero iniciará una gira de conciertos en Elda (Alicante) con cerca de 30 fechas ya cerradas en Sevilla, Segovia, Huelva, Cádiz, Córdoba, Santander, Castellón, Barcelona, Pamplona, San Sebastián, Bilbao, Las Palmas de Gran Canaria, Santa Cruz de Tenerife, Madrid o Cuenca.

¿Te encuentras tan bien como para ponerte a trabajar?

Estoy estupenda y no hay que darle tanta importancia. La decisión de ponerme a trabajar enseguida fue personal, porque llevaba muchos años sin estar en casa. Llevo veinte en Madrid y nunca he vivido tan poco en una ciudad. Eso me sirvió para escribir con tranquilidad y saber lo que quería hacer: música.

¿De dónde has sacado las fuerzas?

Espero que los médicos no me pasen factura, pero la música me ha salvado la vida, sobre todo en lo que se refiere a sacarme de esa modorra aplastante que te produce el enfrentarte a la quimio.

¿Cómo te has sentido estos meses?

Muy bien tratada, aunque hubo un par de ocasiones en las que me sentí perseguida o, mejor dicho, amenazada. Pero la gente, a través de la web e incluso por la calle, ha sido maravillosa y eso ayuda mucho.

Ya han pasado 25 años desde la publicación de 'Luz'...

Sí, pero ni me he dado cuenta, sólo cuando alguien te lo comenta o haces balance, pero es un tiempo que no pesa. Tengo buena memoria y si algo me viene a la cabeza de aquella época es la canción "No aguanto más" y todo lo que en ella decía, esa ansiedad por buscar aire en un sitio no contaminado, por despegar...

¿Qué destacarías de esos años?

Pues que siempre he grabado lo que he querido, con quien he querido y como he querido, pero también algunas malas, como esa infravaloración que he sufrido en el mundo del rock por ser mujer y que ha durado hasta hace bien poco.

¿'Vida tóxica', un título duro?

'Es un guiño que a mi oncólogo le pareció fatal, pero no tiene nada que ver con la quimio, sino con esa cantidad de cosas que ingerimos o pasan por tu vida y que te sientan tan mal. Todo lo compenso con una sonrisa en la portada, tras una sesión de fotos de la que elegí ésta, ya cuando me desmaquillaba, y con unos dibujos de trazo sencillo que he ido haciendo y que adornan el libreto.

'Ser feliz', ¿contundencia para abrir el disco?

No me la esperaba y desde el principio tuve un flechazo porque yo no hubiera sido capaz de escribirla. Es sencilla y con esa mezcla de blues y clásico latino en donde me encuentro muy bien.

¿Y el resto?

Hay otras dos que no son mías. En "18 años" hago una versión de una canción de Dalila, a la que escuché mucho en 2006, y "Lo mejor de lo peor", de Carlos Goñi, la escogí porque es grande. Las otras están escritas entre el 8 de enero y el 9 de octubre, bajo la supervisión una vez más de Paco Trinidad, porque soy fiel a la gente con talento.

¿En resumen, cómo es 'Vida tóxica'?

Es un disco mucho más rockero y mucho más crudo que los anteriores, pero está hecho con muy poca rabia y desde la intimidad.

¿Y el directo para cuándo?

Empezamos la gira en donde la tuve que dejar, lo de Francia tendrá que esperar hasta 2008. Me apetece mucho, porque tengo la sensación de que hay mucha gente que está deseando tocarme y verme para comprobar que estoy bien. Tendré que hacer el esfuerzo para cantar y que no se me caiga la lagrimita".