La crisis energética provocada por la guerra en Ucrania va a suponer un 'boom' del autoconsumo eléctrico. Lo contamos en el sexto episodio de 'Pausa', el pódcast semanal de El Confidencial
¿Qué ocurrirá en Rusia si Putin pierde la guerra? Es una pregunta que se vuelve más urgente con cada kilómetro de terreno que recupera el Ejército ucraniano expulsando al invasor
¿Quién se acuerda ya de la urgencia en cómo ayudar a pagar la cesta de la compra? ¿No era el debate más urgente del momento? Ya no lo parece. Esa es una polémica de hace tres semanas. Aunque el problema siga aquí
Para que los votantes desencantados no tengan que llevarse su voto a otro partido, es muy útil que los partidos tengan a alguien que se enfada desde dentro
El Gobierno está muy activo proponiendo ideas para hacer frente a la inflación. Tan activo que, a veces, se declara a favor o en contra de una misma medida
El manual de las crisis económicas, el de cuando todavía vivíamos en el tiempo de las certezas y los conciertos exigían música en directo, ya no sirve para entender el mundo
Ni las medidas cosméticas ni las bajadas generales de impuestos resuelven el peor desafío del invierno más crudo. Necesitamos un debate más serio sobre eficiencia energética
Subir las pensiones respecto al IPC puede que acabe siendo viable. Eso ya lo veremos. Lo que está menos claro es que sea muy solidario. Muy redistributivo no suena, desde luego
Cualquier amenaza de uso de armas nucleares de un país que las posee debe tomarse en serio, se descarte o no. Pero hay tres argumentos que ayudan a ver más improbable la catástrofe y, entre tanto, vivir más tranquilos
El Confidencial estrena este jueves Pausa, un pódcast semanal dirigido y presentado por Marta García Aller que trata los temas importantes con aquellos que más saben
Subir el salario mínimo interprofesional no va a ser la ruina de las empresas ni la panacea para los más vulnerables a la inflación, pero es un arma arrojadiza muy útil en campaña
La vida de los ucranianos ha dejado de parecerse a la nuestra tras cinco meses de guerra, pero de seguir ayudándolos depende que Europa no deje de parecerse a sí misma