Llevamos cuatro años sin un Gobierno que merezca llamarse así. Este será el tercer Parlamento fracasado. Los partidos se han convertido en la parte más pútrida del sistema
Los dirigentes del PP recitan la letanía que dicta la corrección política, pero ponen velas y hacen encomiendas al santoral entero para que PSOE y Podemos no se pongan de acuerdo
Han pasado 115 días desde las elecciones, pero apenas pueden contarse seis de negociación efectiva para formar Gobierno: los que pasaron entre el 18 de julio y la votación del día 25
Cualquier declaración pública de Sánchez caduca un minuto después de ser emitida. Sus posiciones de hoy no vienen condicionadas por las de ayer ni le vinculan para mañana
Solo se garantiza un Gobierno estable y productivo mediante un acuerdo de colaboración política entre el Partido Socialista y al menos uno de los dos partidos de la derecha constitucional
Sánchez es responsable ante el Parlamento de construir una mayoría de gobierno que merezca tal nombre. Es responsable ante el país de evitar que se repitan las elecciones
No tomen ni una línea de este artículo como un pronóstico sobre el desenlace del culebrón. Hace varias semanas que me desinteresé del final y decidí dedicarme a disfrutar del espectáculo
Lo de Pedro Sánchez el martes en Chamartín superó todo lo anterior. Para asegurarse el monopolio del Ejecutivo, sacó a subasta todo aquello de lo que no puede disponer
El aspirante a presidente ya ha dejado claro que no confía en nadie salvo en su persona. No quiere compartir el gobierno con Podemos, ni con la derecha ni con los independentistas
Macri cayó en la tentación de sentirse providencial y de creer que con su entrada en la Casa Rosada se cerraba una oscura página de la historia y comenzaba otra, llena de luz y de color
Monasterio tendrá cogidos por el cuello a Díaz Ayuso y Aguado. Y preserva su libertad de defender su ideario al completo sin que nadie pueda reprocharle el incumplimiento de un pacto
Este intento de gobierno compartido ha fracasado porque a la criatura le faltaban todas las condiciones de confianza recíproca imprescindibles para alumbrar una coalición sana
Abascal e Iglesias se niegan a ejercer de palafreneros o mozos de espadas de dos señoritos de la política que se creen con derecho a obtener todo a cambio de nada