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El duro plan francés para acabar con la gente que acosa o mete mano en la calle
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El duro plan francés para acabar con la gente que acosa o mete mano en la calle

El país galo está valorando la posibilidad de multar a los hombres en plena calle por piropear, silbar o proferir improperios a las mujeres

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Francia es una de las ciudades europeas qué más está dando que hablar en cuanto a feminismo se refiere. Hace dos meses, el manifiesto de cien francesas contra el "puritanismo" del #Metoo, en el que afirmaban que "el flirteo insistente no es delito", daba la vuelta al mundo. Una opinión que, por cierto, parece no compartir el gobierno francés, que está considerando una nueva ley dura contra el acoso callejero.

El país galo está valorando la posibilidad de multar a los hombres en plena calle por silbar o proferir improperios a las mujeres. La ministra de Igualdad de género, Marlene Schiappa, anunció el 16 de octubre que estaban intentando constituir un grupo de trabajo compuesto por políticos, policías y funcionarios judiciales para definir claramente qué tipo de comportamiento constituye acoso sexual y qué no lo es. Schiappa también lanzó una consulta ciudadana sobre la propuesta. El proyecto de ley francés será votado por los diputados el próximo año. "El objetivo es que toda la sociedad redefina lo que aceptará y lo que no", dijo Schiappa al periódico católico 'La-Croix'.

El objetivo es que toda la sociedad redefina lo que aceptará como acoso y lo que no, algo que aún no está recogido en la legislación

El anuncio de Schiappa se produce en medio de un intenso debate sobre el acoso y la agresión sexual, a pocos días del 8-M, día internacional de la mujer y tras el escándalo producido por la confesión de decenas de mujeres que aseguran haber sido acosadas sexualmente por el director de Hollywood Harvey Weinstein. Estas declaraciones que generaron tanto impacto fueron las precursoras de la campaña global #Metoo ('yo también'), en la que las mujeres comparten en las redes sociales sus experiencias cotidianas de acoso y agresión sexual.

En declaraciones a 'RTL', Schiappa dijo que el proyecto de ley francés era "completamente necesario porque en este momento el acoso callejero no está definido en la ley, lo que impide que se puedan presentar quejas". El proyecto también abordará los ataques sexuales a niños, estableciendo una edad clara para el consentimiento, después de que un tribunal en París dictaminara de forma controvertida que una niña de 11 años había dado su consentimiento para tener relaciones sexuales con un joven de 28 años.

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La primera dama de Francia, Brigitte Macron, instó esta semana a las mujeres a "romper el silencio" sobre los hombres abusivos. "Creo que todo esto debe detenerse ya. Romper el silencio es lo mejor que podría pasar. Las que hablan son muy valientes. Les insto a romper su silencio. Es maravilloso. Realmente, algo está sucediendo", dijo.

Multas en plena calle

Además, se está planteando establecer una multa fija para sancionar el acoso sexual en la calle. El ministro de Interior de Francia, Gerard Collomb, así lo ha confirmado este lunes. "Esto permitirá a nuestras fuerzas de seguridad sancionar rápidamente a los autores de tales actos. De acuerdo con los adelantos, la medida se dirigirá a castigar comportamientos obscenos, incluidos silbidos y frases vulgares, lanzados a las mujeres en el espacio público", aseguró.

En la misma línea, se prevén cambios como incrementar las penas a los autores de violaciones a menores de 15 años, y alargar el periodo de prescripción de estos delitos de 20 a 30 años.

La medida se dirigirá a castigar comportamientos obscenos, incluidos silbidos y frases vulgares, lanzados a las mujeres en el espacio público

Schiappa, ha revelado que la multa inmediata por acoso será de al menos 90 euros, recoge 'El País'. "Combatir el acoso en la calle es importante (...) Frenar a la persona que es violenta en el espacio público es una manera de luchar contra todo acto de violencia sexual", insistió.

Se estima que cada año en Francia hay una media de 700.000 víctimas de "gestos inapropiados", como besos forzados o frotamientos, de los cuales 220.000 se producen en espacios públicos, detalla el informe de la Secretaría de Igualdad gala.

Francia es una de las ciudades europeas qué más está dando que hablar en cuanto a feminismo se refiere. Hace dos meses, el manifiesto de cien francesas contra el "puritanismo" del #Metoo, en el que afirmaban que "el flirteo insistente no es delito", daba la vuelta al mundo. Una opinión que, por cierto, parece no compartir el gobierno francés, que está considerando una nueva ley dura contra el acoso callejero.

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