Mas mete la tijera a los 2.600 trabajadores de los medios públicos catalanes

Los medios públicos catalanes están en pie de guerra. Un recorte del 30% del poder adquisitivo en los últimos años no ha bastado para detener el gasto público que supone mantener una plantilla de 2.600 personas de TV3 y de Catalunya Ràdio. Ahora, la Generalitat quiere meter otra vez la tijera y rebajar la dotación económica anual de 260 millones a 225 millones de euros. Y todo ello en el capítulo primero, es decir, en el salario de los trabajadores.

Sin embargo, se ha decidido que es tabú el salario de los directivos y las producciones externas, que suponen una sangría permanente de las arcas públicas. En otras palabras: se podarán los sueldos de los empleados corrientes, mientras que la cúpula mantendrá sus privilegios fuera de convenio y los amigos podrán seguir produciendo programas millonarios.

La radio pública catalana tiene 420 trabajadores, que ayer realizaron una acampada en plena Diagonal de Barcelona, frente a la sede la emisora. Los otros 2.200 son empleados de la televisión pública. Son las dos patas de una corporación que se ve amenazada por la estrategia del Gobierno de Artur Mas. En estos momentos, la dirección negocia un recorte salarial de los medios sin que se hayan aprobado los Presupuestos de este año, lo que encona aún más el ambiente.

Ayer por la tarde, la dirección presentó una propuesta de tablas salariales a los empleados de Catalunya Ràdio que los equipara con el personal laboral. Hoy, los trabajadores realizarán una asamblea para discutir los puntos. En la emisora radiofónica, el Gobierno quiere aplicar un recorte de 3,3 millones de euros. “Todo ello, con cargo al capítulo primero, es decir, al capítulo de los salarios de los trabajadores. Argumentan que si se tocan las producciones externas es tocar el modelo. Es decir, nos menosprecian. Hay estrellas que tienen unos sueldos equis, pero la radio sale de los que estamos aquí. Ya hemos presentado una demanda contra la empresa para poder conocer los salarios que se pagan a la dirección, pero el juez ha considerado que, como TV3 tiene delegación en Madrid, es un pleito que corresponde a la Audiencia. Por eso, en estos momentos, estamos mirando con nuestros abogados si apelamos a la Audiencia”, señala a El Confidencial Montse Raya, presidenta del Comité de Empresa de Catalunya Ràdio.

Roser Mercadé, secretaria general de la sección sindical de CCOO de TV3, argumenta que la deriva de la estrategia del Gobierno es “un desmantelamiento de los medios públicos. Nos han rebajado el presupuesto de 260 a 225 millones, con una repercusión en el capítulo salarial brutal. Porque al recorte acumulado de los empleados públicos que hemos sufrido tenemos que añadir un recorte voluntario del 5% que aprobamos hace dos años en referéndum. A ello se le ha de sumar la disminución de la plantilla, ya que han sido despedidos corresponsales y las bajas no se cubren. En total, hay más de cien bajas que no han sido cubiertas”, señala Mercadé.

Salarios secretos

Los trabajadores se quejan de que “el salario de los directivos es secreto. En la CCMA hay un director de estrategia y una directora financiera, que parece ser que es la que menos cobra, pero cuyo salario se va a 114.000 euros anuales, mientras que el del director de estrategia se va a los 125.000”. No sería escandaloso, si no fuese porque el salario medio de los trabajadores ronda, en estos momentos, los 30.000 euros brutos al año.

Fuentes de la CCMA consultadas por El Confidencial declinaron hacer comentarios al respecto. Pero hay sospechas sobre la poca efectividad del 'modelo': el comité de TV3 propuso a la dirección un salario máximo de 72.000 euros anuales, lo que representaría un ahorro de 1,3 millones  en el capítulo salarial. Además, denuncian la construcción de un decorado virtual para el Telenotícies con una inversión de 6 millones. Además, uno de los programas estrella de la televisión autonómica, El Gran Dictat, representa un coste de 2,8 millones de euros. Claro que es producido por Triacom, la productora del exgerente de TV3 Oriol Carbó. 

El Comité ha pedido reiteradamente a la dirección de la televisión realizar el programa en estudios propios y no pagar por la utilización de los estudios de Mediapro. Aún con estos dispendios, TV3 sólo tuvo un déficit el año pasado de 2,9 millones de euros, aunque el déficit del conjunto de la CCMA ascendió a 7,5 millones. Un comunicado del Comité de la televisión pública señala que la diferencia se produce “por el déficit de Catalunya Ràdio, puesto que se incluyó como ingreso para el 2012 la venta del edificio de la Avenida Diagonal de Barcelona, cosa que no se ha producido”.

En la radio pública están también enfadados. Les han comunicado que quedan rescindidos los contratos de los corresponsales a partir del 1 de mayo. Pero eso supondrá un ahorro de sólo 125.000 euros, muy lejos de los 3,3 millones que pretenden ahorrar. Y, además, las producciones externas ni se tocan. “También se niegan a decirnos los salarios de los directivos y los jefes. Hoy [por ayer], nos dijeron que se lo están planteando. Pero lo cierto es que a partir del nivel G, que es el de jefe de área, no sabemos lo que cobran”, señala Montse Raya.

Un contraste chocante

Un argumentario realizado por el Comité de Empresa de Catalunya Ràdio arroja más luz sobre el tema: el salario de los empleados de la CCMA está congelado desde el 2009; además, en el 2011 se rebajaron el sueldo un 5% voluntariamente; en el 2012, el Gobierno central obligó a eliminar una paga extra, lo que representa un recorte adicional del 7,14%; y en el 2013, la Generalitat ha decidido eliminar otra mensualidad, por lo que hay un recorte adicional de otro 7,14%. También destaca en el comunicado que, como al resto de los trabajadores públicos “nos han eliminado todos los derechos sociales que se habían conseguido durante años de negociación, como ayuda para comedor, ayuda por hijos, fondo social y planes de pensiones. Por tanto, si sumamos los recortes y el resto de medidas que se nos han aplicado, nuestra pérdida de poder adquisitivo es del 30%”. Y subraya que “dicen los que nos quieren atacar que somos unos privilegiados, pero nuestro único privilegio es trabajar, y hacerlo en una tarea que nos apasiona”, dice el texto.

No se queda ahí el documento. Detalla que la alta dirección de la CCMA se está llenando los bolsillos, ya que los cinco miembros del Consejo de Gobierno “percibieron 1,2 millones de euros en el 2012. Si hacemos cálculos, cobran más que un consejero de la Generalitat”. Arremeten contra lo que consideran un despropósito: el 75% del gasto que se destina a complementos no es público, porque “estos complementos no están regulados por convenio”. Y critican especialmente que no se quiera regular por convenio el salario de los directivos. “Prefieren administrar dineros públicos como han hecho hasta ahora, otorgando salarios a dedo y de manera arbitraria. Y este modelo no se puede tocar, porque es su modelo”.