Posada tira de reglamento para evitar más fotos de escaños vacíos al estilo Cantó

El presidente del Congreso de los Diputados, Jesús Posada, ha encargado al secretario general de la cámara que redacte una carta que en los próximos días llegará a todas sus señorías en las que se les recodará que no pueden tomar fotografías del hemiciclo desde sus escaños ni con sus Iphone ni sus Ipads ni con ningún otro dispositivo. La norma no es nueva y está recogida incluso en el propio reglamento del Congreso desde hace años, pero Posada se ha visto en la obligación de recordar a los nuevos parlamentarios que no pueden ejercer de cronistas gráficos de lo que acontece en el pleno. Sea como fuere, la carta llega después de que, la semana pasada, el diputado Toni Cantó publicase en su cuenta de Twitter varias imágenes del hemiciclo medio vacío en la vuelta al curso de los diputados. Un asunto que desencadenó en polémica tras los insultos que, por ello, le dedicó el popular Antonio Gallego, que le llamó “tonto” y le conminó a volver a la farándula.

El propio parlamentario de UPyD destacaba ayer que le habían prohibido tomar imágenes desde su escaño y volvía a generar polémica ante lo que, en algunos foros de la red, se ha entendido como una nueva censura del propio Posada. De hecho, ayer por la tarde ya circulaba en la web de Actuable una iniciativa que recogía firmas para pedir al presidente del Congreso que no prohíba las fotografías. “Ahora se quiere evitar también que los diputados informen libremente a los ciudadanos de lo que sucede en el Congreso, que se supone que es la plaza pública de la democracia”, defiende el promotor de la iniciativa, Alex Beltrán.

Posada se ha limitado, sin embargo, a recordar a los últimos en llegar al Congreso lo que ya recogen las normas internas de la casas. El artículo 98.3 del reglamento especifica que “nadie podrá, sin estar expresamente autorizado por el Presidente del Congreso, realizar grabaciones gráficas o sonoras de las sesiones de los órganos de la Cámara”. Una labor que la Mesa de la Cámara reserva solo para los profesionales de la información debidamente acreditados y solo desde los lugares destinados para ellos, las tribunas de los fotógrafos instaladas a ambos lados del hemiciclo. La prohibición afecta por igual a diputados y público, que tampoco pueden tomar imágenes desde las tribunas del piso superior. En otras legislaturas, recuerdan desde la Cámara, siempre que un diputado era pillado haciendo fotografías era apercibido con una nota por los ujieres del hemiciclo.

Dialogo abierto con los fotógrafos

La polémica en torno a las imágenes se está convirtiendo en un asunto recurrente en esta Legislatura. De hecho, según explican desde el Congreso, los propios fotógrafos se habrían quejado también de que los parlamentarios no cumplan con las normas que a ellos les imponen. Posada amenazó en diciembre con retirar la acreditación a todo fotógrafo que se exceda en su labor profesional y vulnere los “derechos fundamentales” de los diputados con  imágenes de los documentos personales de los parlamentarios o de las pantallas de sus teléfonos móviles, como le ocurrió a Rubalcaba.

Según acordó la Mesa en diciembre, la acreditación de los fotógrafos responsables de esos comportamientos podría ser retirada por un plazo máximo de un año. Desde principios de año, sin embargo, el Congreso ha mantenido una mesa de diálogo con los representantes de los fotógrafos para estudiar posibles medidas de autocontrol. En concreto se han celebrado ya dos reuniones con el propio Posada y otras con dos con representantes de la FAPE, el Sindicato de Periodistas y la Asociación Nacional de Informadores Gráficos de Prensa y Televisión (ANIGP).