El 80% de los europeos dice tener problemas para cambiar de banco

Ocho de cada diez consumidores de la Unión Europea reconoce tener "problemas" a la hora de cambiar su cuenta de entidad financiera, según recoge un informe de la Comisión Europea publicado esta semana. Las dificultades que plantean los bancos, además de la falta de información y la escasa experiencia en consumo de productos financieros, son los culpables de que solo el 19% de los ciudadanos comunitarios reconozcan haber cambiado su cuenta sin problema.

El estudio revela que el 71% de los bancos no asisten a la hora de facilitar el cambio de cuenta u omiten información clave para el cliente, mientras que el 7% rechaza abrir una cuenta corriente y/o cambiar un pago pendiente en el plazo estipulado de 14 días laborales. 

"Los resultados explican por qué los consumidores cambian de banco de forma tan poco frecuente", critica Michael Barnier, comisario de Mercado Interior. "Si los consumidores no pueden cambiar fácilmente de cuenta, tampoco pueden aprovecharse de los mejores y más baratos servicios bancarios que se ofrecen en otras entidades", continua Barnier, "y al mercado interior se le priva de un factor de competitividad que lleva a la innovación, a ahorrar costes y a servicios financieros de mayor calidad. Es, en definitiva, un obstáculo al crecimiento".

En España la situación es extrapolable tanto en porcentaje como en el origen de los problemas. "Puede haber una falta de información por parte del banco que se abandona, pero la entidad nueva hace todo lo posible por facilitar el cambio", relata a El Confidencial Rubén Sánchez, portavoz de Facua. De este modo, desde la Comisión instan a los bancos europeos a "hacer más para facilitar el cambio sin las dificultades indebidas o el temor de interrupciones en el pago de recibos" para sortear las que identifican como "barreras significativas".

Temor a 'tocar' la hipoteca

De nuevo en nuestro país, el cambio menos habitual es el que atañe a las hipotecas. "Los consumidores tienen muchísimo miedo a cambiar la hipoteca, porque lo ven como una operación demasiado grande y costosa", indican desde Facua. "En realidad es un procedimiento muy simple, lo único que se debe hacer es valorar si el coste, que incluye gastos de tasación de la vivienda, del notario y con el banco, son compensadas con el ahorro del cambio". 

La organización de consumidores también señala que es necesario "obtener una oferta vinculante del nuevo banco para intentar que el actual la iguale" y recuerda el riesgo de tener una cláusula de cancelación total en la hipoteca "que puede suponer entre el 0,5% y el 1% del total".

Al respecto el Ejecutivo europeo lamenta que la autorregulación no esté dando los frutos esperados y advierten que en estos momentos se están "analizando los posibles cursos de acción" para mejorar la situación del consumidor.