El Atlético siente la presión de Hacienda, CSD y LFP: su gasto en fichajes es mínimo

El Atlético de Madrid camina con pies de plomo en el mercado de fichajes. Y es una actitud que ya adoptó la pasada temporada. El club rojiblanco sabe que su situación económica es delicada, no quiere tropezar y para ello han adoptado una serie de medidas como limitar los salarios o reducir sus gastos en fichajes. Todos los que forman parte del club son conscientes de la realidad económica y se adaptan a ella. Simeone ha demandado una serie de refuerzos y, poco a poco, están llegando dentro de las posibilidades del equipo y atendiendo a la premisa de gastar lo justo: la inversión en Baptistao ha sido de 7 millones, David Villa ha costado 2’1 (los correspondientes al primer pago de su fichaje) y Demichelis podría ser el tercero en aterrizar en el Vicente Calderón... a coste cero.

Los organismos que rigen el mundo del deporte se han puesto serios. En especial con el fútbol. El objetivo es erradicar definitivamente las deudas de los clubes. Y si éstos no se ponen manos a la obra para buscar soluciones, se tomarán medidas. Uno de los equipos señalados es el Atlético de Madrid cuya deuda con Hacienda llegó a los 120 millones de euros. En la ribera del Manzanares han sentido la presión del fisco, del Consejo Superior de Deportes y de la LFP y se han aplicado. El club rojiblanco ha rentabilizado sus grandes figuras colocándolos en el mercado y ha pescado en éste gastando lo justo.

La pasada temporada el Atlético de Madrid se reforzó invirtiendo un millón de euros. Ni un céntimo más. Al Vicente Calderón llegaron jugadores a coste cero como el Cebolla Rodríguez y otros que regresaban tras haber estado cedidos como fue el caso de Diego Costa, Pulido o Raúl García. El millón desembolsado fue a parar a Getafe por el fichaje del Cata Díaz. Con semejante inversión cualquiera puede pensar que es casi imposible firmar una campaña decente. Simeone se encargó de desmentir a los que desconfiaron: no sólo conquistó la Copa del Rey frente al Real Madrid en el Santiago Bernabéu sino que la próxima temporada jugarán la Champions.

Hasta el momento, nueve millones

La filosofía adoptada hace un año sigue vigente en el actual mercado estival. El secreto a voces se confirmó cuando la Liga bajó el telón: Falcao estaba en venta, el Mónaco puso 60 millones sobre la mesa y el colombiano se marchó al Principado. A las arcas del Atlético no llegó el montante global de la operación: los fondos de inversión y Hacienda se llevaron su parte. A pesar del dinero ingresado, el club rojiblanco no ha tirado la casa por la ventana. Hasta ahora, sólo han llegado un par de jugadores: Leo Baptistao y David Villa. El primero costó 7 millones aproximadamente mientras que el segundo ha supuesto una inversión inicial de 2’1 millones (el resto llegará las dos próximas temporadas en pagos de dos y un millones).

Los rumores, cada vez más fuertes, apuntan a que Demichelis será el siguiente en vestir la camiseta rojiblanca. El argentino se debatía entre River o seguir en España y parece que ha optado por la segunda opción pensando en su familia. Su contrato con el Málaga acababa el 30 de junio y el club andaluz le había ofrecido la posibilidad de renovar a la baja. Algo que no convenció al central. Todo esto, unido a la ausencia de Pellegrini, ha podido ser la clave para elegir Madrid como siguiente destino. Sólo falta un detalle: la confirmación oficial. De producirse, el argentino llegaría libre, es decir, a coste cero. Reducir los gastos no es la única opción que baraja el Atlético para seguir reforzando su plantilla: Peter Lim, a través de Jorge Mendes, podría entrar en escena financiando algún fichaje.