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Un 'indomable' Atlético de Madrid remonta al Betis y apunta muy alto
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FALCAO JUEGA 51 MINUTOS Y SE COLOCA PICHICHI DE LA LIGA

Un 'indomable' Atlético de Madrid remonta al Betis y apunta muy alto

El Atlético de Madrid se llevó los tres puntos en un partido que tuvo absolutamente de todo, y donde consiguió remontar dos afortunados goles del Betis

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Un 'indomable' Atlético de Madrid remonta al Betis y apunta muy alto

El Atlético de Madrid se llevó los tres puntos en un partido que tuvo absolutamente de todo, y donde consiguió remontar dos afortunados goles del Betis para colocarse segundo en la tabla como más cercano perseguidor del líder, el todavía inmaculado FC Barcelona. Los locales, que optaban también a esa segunda plaza, acabaron con dos expulsados y su público criticó con dureza las decisiones del catalán Álvarez Izquierdo. De hecho, el Benito Villamarín acabó desesperado y cantándole a los rojiblancos tras el gol que cerró el marcador (con toda la guasa sevillana que se pueda imaginar) un “¡Campeones, campeones!” que, por desgracia, dio paso a altercados serios en la grada una vez acabado el partido.

Pero en lo deportivo y más allá del acierto o desacierto del colegiado, los del 'Cholo' Simeone demostraron que su proyecto marcha repleto de confianza y que de momento apunta muy alto. La estrella del equipo, Radamel Falcao, jugó con molestias musculares pero cuando fue sustituido en el minuto 51 ya le había dado tiempo de hacer un 'doblete' para igualar momentáneamente el marcador y colocarse pichichi provisional de la Liga con siete tantos en cinco partidos. Además, las alternativas de la plantilla del Manzanares parecen a día de hoy tan diversas como efectivas.

El partido enfrentaba a dos conjuntos que saben a lo que juegan y el intercambio de golpes pronto se hizo una tónica constante, lo que deparó un choque de esos que ensalzan el nivel de la Liga. El equipo madrileño salió con la premisa de evitar las rápidas contras del puñado de pequeñas balas que dispuso en ataque Pepe Mel. La labor se iba cumpliendo con las vigilancias constantes de Gabi y Mario Suárez mientras el Atlético se iba sintiendo superior poco a poco cada vez que su ataque trenzaba tres pases en campo contrario.

Pese a lo atractivo de ambos planteamientos, la calma todavía se controlaba por ambos equipos mediada la primera mitad, hasta que en el minuto 25 y sin apenas ocasiones previas claras un centro envenenado a pierna cambiada de Agra desde la banda izquierda acabó desconcertando a la defensa visitante y colándose por el segundo palo ante la impotente estirada de Asenjo. El portero vallisoletano, este miércoles sustituto del lesionado leve Courtois, evitó inmediatamente después el 2-0 en un mano a mano ante Rubén Castro.

Y precisamente en el siguiente contrataque los rojiblancos encontraron por fin el hueco para pisar con comodidad el área bética. Arda cedió atrás a Raúl García quien con un violento centro chut raso cruzado encontró en el área pequeña la bota de Radamel Falcao. El 'Tigre' no bromea en esas situaciones y con ese tanto igualaba a Messi al frente de la tabla de goleadores.

La rápida igualada espoleó a los de Simeone, que comenzaron a acosar al Betis en busca del segundo tanto. La calidad de las delanteras afloró y Casto tuvo que emplearse a fondo en dos ocasiones para evitar el 1-2. La segunda de estas intervenciones, en el 41’ a tiro a bocajarro de Falcao, es una de esas paradas para enmarcar por lo espectacular de sus reflejos.

Pero cuando el árbitro estaba a punto de mandar a todos al descanso, el Atlético desaprovechó un córner que los puñales béticos convirtieron en gol. Cierto es que el repliegue de los madrileños parecía haber llegado a tiempo de controlar la situación, pero el centro de Juan Carlos desde la izquierda rebotó en Juanfran y se coló por encima de Asenjo tras una curiosa carambola. Vaya dos goles de pura mala suerte para el restreno liguero del ex de Valladolid y Málaga…

Tras el descanso, penalti y polémica

Como si no hubiera habido descanso ni segundo gol local, la segunda mitad comenzó con el Atleti volcado a por el empate. Y a los pocos segundos Falcao sufrió un claro penalti cuando se disponía a disparar y Perquis fue rigurosamente expulsado. Tras igualar el electrónico desde los once metros, el colombiano dejó el campo por precaución para que entrara Diego Costa. El brasileño consiguió nada más salir remachar en el segundo palo un córner prolongado por Mario Suárez, y en cinco minutos de segunda parte, el Betis había visto como le remontaban y los ánimos empezaron a caldearse peligrosamente. Por cierto que tras el 2-3 se pudo ver a Falcao celebrando desde el banquillo con una bolsa de hielo en su aductor dañado.

Mel consiguió rehacer a su equipo pese a la inferioridad y los visitantes no conseguían imponer el control que parecía lógico con esa situación. Pero cuando más abierto parecía el duelo, llegó la segunda gran polémica de la noche. Campbell vio la roja por doble amonestación tras controlar un balón con la mano en el área rival. Los locales pidieron en esa jugada mano previa de Filipe Luis que hubiera sido penalti.

Los últimos minutos se caracterizaron por el ambiente crispado de la grada y cuando el partido ya estaba en el descuento, Raúl García conseguía aprovecharse de ello para hacer a placer el definitivo 2-4. Gran victoria para los Supercampeones de Euopa en el partido aplazado a principios de mes precisamente tras la victoria ante el Chelsea en Mónaco. De momento, el 'efecto Simeone' sigue dando muestras de la esperada grandeza y saber estar que se añora desde hace tanto tiempo por el Vicente Calderón.  

El Atlético de Madrid se llevó los tres puntos en un partido que tuvo absolutamente de todo, y donde consiguió remontar dos afortunados goles del Betis para colocarse segundo en la tabla como más cercano perseguidor del líder, el todavía inmaculado FC Barcelona. Los locales, que optaban también a esa segunda plaza, acabaron con dos expulsados y su público criticó con dureza las decisiones del catalán Álvarez Izquierdo. De hecho, el Benito Villamarín acabó desesperado y cantándole a los rojiblancos tras el gol que cerró el marcador (con toda la guasa sevillana que se pueda imaginar) un “¡Campeones, campeones!” que, por desgracia, dio paso a altercados serios en la grada una vez acabado el partido.

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