Villar renunció a la subvención del CSD un minuto antes de que le anunciaran su recorte

Ángel María Villar renunció a la subvención del Consejo Superior de Deportes un minuto antes de que Miguel Cardenal, Presidente del CSD, comunicara a los directivos federativos el importante recorte que iba a sufrir el dinero que el Gobierno español destina a la RFEF y al resto de Federaciones deportivas. El presidente del fútbol español aprovechó la situación para llevar a cabo un importante lavado de imagen de un deporte que, en ocasiones, es castigado socialmente por los excesos como fueron los 600.000 euros que recibieron los jugadores de la selección española por su éxito en Sudáfrica. Aunque hay que recordar que por conquistar el Mundial, la RFEF, un organismo privado, recibió 25 millones de euros como premio. Ahora, en 2012, le correspondía una cantidad cercana a los 2,9 millones.

"Somos un ejemplo y no tenemos por qué ocultarlo", aseguraba Villar. Pero lo cierto es que el Gobierno sigue con su plan de ajuste económico y el deporte no va a quedase al margen. El primero en sufrirlo ha sido el fútbol, pero no será el único deporte que ve cómo el dinero que llegaba -en este caso iba dirigido al fútbol aficionado- o bien se reduce o desaparece de la cuenta de resultados. En el caso del fútbol el ahorro del CSD es de 3,3 millones de euros, dinero que recibió en 2001. Sin ir más lejos, en 2011 el Gobierno destinó 80 millones al deporte.

Villar, debido a las excelentes relaciones que mantiene con Cardenal, sabía del recorte presupuestario - que en algunas autonomías podría llegar al 50 por ciento- y quiso dar un golpe de efecto aprovechando el movimiento del gobierno, renunciando al dinero que el CSD le tenía asignado. La realidad dice que la RFEF de Villar se encuentra en un momento dulce tanto en lo deportivo (Eurocopa, Mundial, Eurocopa sub 21 y sub 19 en estos momentos) y en lo económico (el último balance se cerró con 6,04 millones de beneficio por los 131 millones de cifra de negocio).

Años atrás, con Lissaveztky de Secretario de Estado, el CSD retuvo la subvención durante tres temporadas por lo que consideraba irregularidades contables que nunca fueron demostradas, ahogando económicamente a la RFEF. Ahora la relación entre la Federación y Gobierno nada tiene que ver. De hecho, Cardenal fue miembro del Comité de Competición hasta el momento de ser designado como Presidente del Consejo Superior de Deportes.

Tal y como anunció Miguel Cardenal, el dinero que en este 2012 el Gobierno iba a ser destinado a la RFEF será repartido entre las otras 64 Federaciones que figuran en el Consejo Superior de Deportes. "Han decidido que la subvención que les corresponde se pudiera repartir entre otras federaciones", confirmó Cardenal. Lo que no comentó el presidente del CSD era la cuantía del recorte que había sufrido la RFEF y que por extensión sufrirán el resto de federaciones. Se estima que el porcentaje medio de la subvención puede estar entre el 10 y 15% del dinero que el Gobierno destinaba a cada Federación.