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El Madrid apela al 'espíritu Djordjevic' para vencer el quinto partido en el Palau
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EL SERBIO CONQUISTÓ EL TÍTULO CON EL MADRID EN LA 99-00 EN UNA FINAL SIMILAR A ÉSTA

El Madrid apela al 'espíritu Djordjevic' para vencer el quinto partido en el Palau

La final de la Liga Endesa nos está ofreciendo una extraordinaria pelea entre dos púgiles capaces de noquear al rival y levantarse al mismo tiempo para

Foto: El Madrid apela al 'espíritu Djordjevic' para vencer el quinto partido en el Palau
El Madrid apela al 'espíritu Djordjevic' para vencer el quinto partido en el Palau

La final de la Liga Endesa nos está ofreciendo una extraordinaria pelea entre dos púgiles capaces de noquear al rival y levantarse al mismo tiempo para seguir golpeando. El varapalo que sufrió el Barça el pasado lunes, en forma de una humillante derrota, no afectó para nada a los de Xavi Pascual en el partido de ayer. En el caso del Madrid ocurrió tres cuartas partes de lo mismo en los duelos del Palau Blaugrana, perdiendo el primero de la manera más cruel, con el triple de Marcelinho Huertas en el último instante, y reponiéndose inmediatamente para ganar el segundo y asegurarse un factor cancha que finalmente no ha sabido aprovechar.

El sábado no habrá tiempo para levantarse. Aquél que caiga a la lona perderá el combate y el título. El conjunto azulgrana celebra que sea su pista la que dictamine el campeón de esta temporada 2011-2012, y es que cuando lo veían todo perdido, se sacaron de la manga un auténtico partidazo, con un Lorbek sobresaliente, y golpearon en la línea de flotación y en la moral de la nave madridista. Sin embargo, el equipo blanco tiene claro el espejo en el que mirarse, el de la temporada 1999-2000, con una final que arroja grandes similitudes con respecto a la que estamos viviendo ahora. 

Por aquel entonces, los blancos vencieron en el primer partido de Barcelona y los azulgrana empataron la serie en el segundo duelo. Con la final ya en la capital de España, los blancos dieron un zarpazo que parecía definitivo, venciendo el tercer encuentro por 26 puntos (87-61), misma diferencia que los de Pablo Laso consiguieron el pasado lunes. Cuando el Barça parecía 'muerto', se rehizo y ganó en el Palacio, llevando la resolución del título a su cancha. Hasta aquí podríamos hablar de un calco entre las campañas 99-00 y la actual, pero habrá que ver si la conclusión es la misma.

La expedición madridista espera que sí, y ayer en la zona mixta ya se hablaba de aquella final y de la figura de Sasha Djordjevic. El serbio había cambiado la elástica azulgrana por la blanca y acudía al Palau bajo una tremenda presión. Ahora bien, esa palabra no estaba en el diccionario del sensacional base balcánico, que condujo al Real Madrid a un nuevo título. Los hombres por aquel entonces dirigidos por Sergio Scariolo silenciaron el tremendo ambiente que se vivía en la Ciudad Condal, donde los hinchas culés casi tocaban con las manos un nuevo entorchado de la ACB. Sin embargo, el 73-82 final hizo que el trofeo viajara a Madrid para regocijo de los jugadores blancos, en especial de Djordjevic, que se recreó en el centro de la cancha del Palau, con el correspondiente enfado del respetable, lo que provocó que los jugadores merengues tuvieran que retirarse rápidamente a vestuarios.

A esto se encomienda un Madrid que ayer vio cómo le devolvían el tremendo bofetón del tercer partido. El aspecto físico, sin duda, será importante, ya que ha sido una temporada muy cargada, pero aún más lo va a ser el psicológico. El que mejor sepa convivir con la presión y olvide cuanto antes lo sucedido en los choques precedentes para centrarse única y exclusivamente en los 40 minutos (o algo más si hay prórroga) del quinto partido tendrá muchas opciones de levantar un trofeo que ambos están mereciendo. Sólo uno alzará el trofeo, ¿se impondrá la magia del Palau o el 'espíritu Djordjevic'?

La final de la Liga Endesa nos está ofreciendo una extraordinaria pelea entre dos púgiles capaces de noquear al rival y levantarse al mismo tiempo para seguir golpeando. El varapalo que sufrió el Barça el pasado lunes, en forma de una humillante derrota, no afectó para nada a los de Xavi Pascual en el partido de ayer. En el caso del Madrid ocurrió tres cuartas partes de lo mismo en los duelos del Palau Blaugrana, perdiendo el primero de la manera más cruel, con el triple de Marcelinho Huertas en el último instante, y reponiéndose inmediatamente para ganar el segundo y asegurarse un factor cancha que finalmente no ha sabido aprovechar.