Al lector se le pasa el calentón

Mientras las editoriales y sus editores siguen preguntándose cómo ganar dinero con los contenidos, un nuevo ciclo de superventas muere. La Feria del libro de Londres, que se inicia hoy y se prolonga hasta el miércoles con cerca de 1.000 expositores de 57 países y Turquía como protagonista, marca el inicio del lanzamiento de la siguiente tendencia literaria del mercado. Las primeras noticias que llegan desde la segunda cita más importante del libro en Europa –tras Fráncfort- señalan que el sexo ya es agua pasada. Todos aquellos autores que se hayan lanzado a escribir novelas subidas de tono deben saber que llegan tarde, que el sexo ha perdido potencia. Al lector se le ha enfriado el calentón y a la fórmula E. L. James no se le puede exprimir más. Volvemos a la casilla de salida: thriller, novela negra y novela histórica.

Toca buscar un nuevo libro capaz de cambiar las cuentas del año y arreglar los desperfectos del quinto año de pérdidas y entre las novedades que se han manejado la semana previa a la cita ha desaparecido la literatura de salsa tórrida. El rey indiscutible sigue siendo la novela negra en todas sus variantes, desde el thriller a la escandinava, pasando por el ‘crime’ y el suspense. En el Reino Unido sienten especial atractivo por las historias de niños raptados (las consecuencias del caso Madeleine), en Alemania la protagonista absoluta es la sangre (sin excepción), a los nórdicos la negra social y a los norteamericanos… lo que venda.

Repetir el éxito

En 2012, Random House, compañía editorial propiedad del Grupo Bertelsmann, incrementó sus ventas en casi 400 millones de euros. Tal y como informó Daniel Toledo, el grupo lo consiguió gracias al fenómeno Cincuenta sombras: “El grupo editorial líder en el mundo se aprovechó de la pujanza de su cartera de contenidos, sobre todo de la trilogía de las Cincuenta sombras, para cerrar un ejercicio financiero récord”, expuso el portavoz del gigante alemán durante la presentación de resultados hace unas semanas.

La escritora E. L. James calentó las ventas en libro impreso, e-book y audio, en las divisiones en inglés, alemán y español de Random House, y las disparó a 70 millones de ediciones. “Es la saga con ventas más rápidas en toda la historia de la compañía”, dijo la casa. La editorial facturó en 2012 un 22,5% más que el año anterior: 2.142 millones de euros. Los tres títulos, que en España se publicaron al tiempo, casi permitió a la empresa duplicar el beneficio bruto de explotación: 325 millones de euros, un 75,7% más.  

Para hacernos una idea de lo que suponen esos 400 millones de euros de ganancias de Random House basta señalar que en el último año las editoriales españolas captaron 180 millones de euros por la venta de derechos de sus autores al extranjero, según el ICEX España Exportación e Inversiones. En este sentido, el número de libros publicados en el Reino Unido traducidos de los catálogos de las editoriales españolas, según el ISBN, se incrementó en 2011 un 45%, con un total de 117 títulos (el mercado británico sólo traduce el 3% de su producción editorial).