Defensa compra a Israel los morteros para Afganistán que fallaron en las pruebas

Dos años después de que el Ejército pidiera más capacidad de fuego para las tropas destinadas en la guerra de Afganistán, el Ministerio de Defensa ha cerrado la compra de diez morteros sobre vehículos ligeros 4x4 por valor de 7,9 millones de euros a la empresa israelí Soltam. El mínimo de artillería ligera solicitado por el Estado Mayor para garantizar mejor la protección de las columnas de blindados y las posiciones de las fuerzas españolas en el país asiático no estará listo, como mínimo, hasta entrado el próximo año, para cuando se prevé que esté en marcha la retirada.

La adjudicación final, por el procedimiento negociado sin publicidad, se ha hecho pública esta semana pese a las protestas de la empresa española Expal, especializada en la fabricación de explosivos y de morteros que se quedó fuera del proceso por considerar Defensa que no cumplía los requisitos requeridos. La firma de capital nacional es especialista en el mismo tipo de sistemas de armas comprado a los israelíes, con modelos del mismo calibre al adquirido para Afganistán, pero para el concurso no contaba con el vehículo de base que pedía el Ministerio.

En la red se ha difundido un vídeo donde se puede ver una imagen de la prueba a la que fue sometido en España el mortero que finalmente se ha comprado. Uno de los proyectiles lanzados no salió disparado del tubo y se quedó dentro del blindado sin estallar, por lo que se puede ver a continuación cómo la tripulación abandona a toda prisa el vehículo.

El Ministerio de Defensa ha tardado nueve meses en adjudicar el procedimiento negociado pese a que, de entrada, sólo tuvo en cuenta la opción israelí, circunstancia que llevó a Expal a recurrirlo. La empresa española no ha cejado en su protesta y, agotada la vía administrativa, anuncia ahora recurrir a la justicia ordinaria por considerarse discriminada.

En fuentes militares no precisan todavía el plazo que necesitarán para enviar los morteros al contingente español destinado en el conflicto de Afganistán, una vez que reciban las diez unidades compradas a Israel. No obstante, por los precedentes de la adquisición de los RG-31 de origen surafricano y los "Lince" italianos, desplegados desde el pasado año en el país asiático, no parece probable que los puedan enviar antes del próximo verano. José Luis Rodríguez Zapatero dejó anunciado un programa de retirada gradual de las tropas españolas de Afganistán, que empezaba con un diez por ciento de las fuerzas a principios de 2012 y terminaba en 2014.

El Estado Mayor del Ejército de Tierra tenía diseñado desde finales de 2009 el recurso de blindado ligero tipo VAMTAC con cabina para equipar un mortero de 81 mm, listo para ser utilizado inmediatamente ante cualquier emboscada o ataque de los talibán a las columnas o patrullas de las tropas españolas que se mueven por la provincia afgana bajo su responsabilidad: Badghis. El sistema de armas adquirido permitirá responder con precisión y sin demora al fuego de fusilaría o lanzagranadas que emplea la insurgencia y sin tener que esperar al apoyo aéreo, normalmente los helicópteros italianos con base en Herat.