La casa automovilista italiana Lamborghini regaló este miércoles al papa Francisco una edición especial de su modelo "Huracan" de color blanco y con detalles en oro, los colores de la bandera vaticana, que será subastado para ayudar a regresar a Irak a las comunidades cristianas desplazadas. Se trata de 12.000 personas de las comunidades sirio-católicas, sirio-ortodoxas y caldeas.
El Lamborghini fue entregado antes de la audiencia general por los dirigentes de la casa automovilística y bendecido por el papa. Será subastado por la casa Sotheby's y Francisco ha decidido que el dinero vaya al proyecto de la organización "Ayuda a la Iglesia que sufre", para que puedan regresar al valle de Nínive las comunidades cristianas que tuvieron que huir de allí con la llegada de las milicias del Estado Islámico.
Pero no es el único regalo que ha recibido el papa Francisco. Los obsequios que el pontífice ha recibido en sus visitas a otros países van de un "crucifijo comunista" a balones de fútbol pasando por uns Harley Davidson.