Todas las culturas y en todas las épocas han celebrado el solsticio de invierno, la noche más larga del año.
En esta época uno de los lugares en los que aún sigue vivo ese espíritu es Stonehenge, también llamado 'El Templo del Sol', de unos 5.000 años de antigüedad. Allí se celebra, además, el solsticio de verano cada 21 de junio, como marca el ancestral calendario druida.
Centenares de personas se congregan en el conjunto megalítico situado en el suroeste de Inglaterra, Reino Unido, para celebrar el solsticio de invierno y ver amanecer juntos.