España gasta 350.000 euros en un curso de misiones de paz que concertó Zapatero

España debe desembolsar 350.000 euros para financiar la celebración en Madrid de un curso de doce días sobre misiones de paz, que tuvo lugar el pasado otoño y al que asistió medio centenar de personas. Pese a los rigores presupuestarios que impone la crisis económica, y a que no parece una prioridad nacional, el Congreso de los Diputados convalidará el jueves este acuerdo con Naciones Unidas, producto de la herencia de José Luis Rodríguez Zapatero. El Gobierno de Mariano Rajoy cumple así con un compromiso que adquirió el Ejecutivo socialista en octubre de 2011, justo un mes antes de las elecciones generales.

Según consta en el Canje de Cartas constitutivo del Acuerdo entre el Reino de España y las Naciones Unidas, la ONU “agradece profundamente a España por su ofrecimiento de acoger este “curso de personal directivo de misiones de paz”, que se celebró en Madrid entre el 31 de octubre y el 11 de noviembre de 2011. Sin embargo, este agradecimiento está acompañado de diversas obligaciones, como el abono de 350.000 euros al organismo internacional “como contribución voluntaria para sufragar los gastos” del seminario.

Además de esta cifra, España se comprometió a proporcionar las instalaciones, personal de apoyo, todo tipo de materiales, ordenadores, protección policial, así como a otorgar gratuitamente visados y permisos de entrada a los participantes. No obstante, las arcas públicas no costearon todos los gastos, ya que la ONU se encargó de sufragar el desplazamiento, alojamiento y comida de la mayoría de los estudiantes. El seminario, de doce días de duración, contaba con un máximo de 53 participantes de varios países, incluidos miembros del departamento de Operaciones de Mantenimiento de la Paz de la ONU, así como otros funcionarios del organismo.

Pese a que el acuerdo con la ONU llega ahora al Congreso de los Diputados, el pacto se firmó en Nueva York el 17 y el 28 de octubre de 2011, un mes antes de que tuvieran lugar las elecciones generales del 20-N, por lo que el Ministerio de Exteriores, entonces dirigido por Trinidad Jiménez, tuvo que aplicar de forma provisional el Canje de Cartas entre el Reino de España y el organismo internacional.

De la Alianza de Civilizaciones a ONU-HÁBITAT

Esta operación es una muestra más de la estrategia de Zapatero por dotar a España de un mayor papel en Naciones Unidas incrementando los fondos destinados a sus diversas agencias. Entre otras cosas acciones polémicas, el Gobierno socialistas lanzó la Alianza de Civilizaciones, subvencionó la cúpula de Miquel Barceló en Ginebra o financió el establecimiento en Barcelona del Instituto Internacional de la Universidad de la ONU.

Asimismo, Zapatero pudo colocar a la exministra de Igualdad Bibiana Aído como asesora de Michele Bachelet en ONU-Mujeres, y a Joan Clos, exministro de Industria, como director ejecutivo de ONU-HÁBITAT, aunque Miguel Ángel Moratinos fracasó en su intento de situarse al frente de la FAO. Precisamente, el Congreso de los Diputados convalida este jueves otro acuerdo con el organismo que dirige Clos para el establecimiento de una sede en Madrid y otra subsede en Barcelona de ONU-HÁBITAT.