Grandes empresarios hacen cola para que Rajoy los reciba en su despacho de Génova

Los presidentes de las grandes empresas españolas huelen que el poder está a punto de cambiar de dueño. Y quieren estar bien posicionados cuando Mariano Rajoy, al que ya ven como caballo ganador, llegue a La Moncloa. La lista de espera para ser recibidos por el líder del PP es "muy grande", según fuentes de la dirección de Génova consultadas por El Confidencial, que reconocen que los máximos ejecutivos de multinacionales extranjeras también hacen cola: el último, Jan Hommen, consejero delegado de ING Group.

"El que no trata de aproximarse ahora a Rajoy es un mal empresario", admite con cierta ironía un dirigente cercano al presidente del PP, que asegura que diariamente se reciben en Génova "decenas de peticiones" de grandes ejecutivos, especialmente de las compañías que cotizan en el Ibex, para entrevistarse con el que dan como seguro vencedor de las elecciones generales y próximo presidente del Gobierno. Francisco Sánchez Asiaín, presidente del banco japonés de inversión Nomura en España, ha sido una de las más recientes incorporaciones a esa lista de espera.

Rajoy trata de escuchar a todos los grandes para conocer su punto de vista sobre la crítica situación económica y las reformas puestas en marcha por José Luis Rodríguez Zapatero -muchas de las cuales deberán ser culminadas por un eventual Gobierno del PP-, pero su dilatada agenda, coordinada por su equipo más cercano de colaboradores, se lo impide. Y cuando cita a algún empresario en su despacho de la sede de la calle Génova lo hace de forma absolutamente discreta, sin la presencia de periodistas y fotógrafos.

El acercamiento de Brufau

El presidente de Repsol, Antonio Brufau, ha sido uno de los últimos en peregrinar hasta ese despacho, según fuentes del PP. La visita del empresario catalán no sólo se ocultó a los medios de comunicación, sino que éste entró de forma velada en el garaje de la sede popular a bordo de su vehículo y desde allí subió directamente en ascensor hasta la séptima planta, donde Rajoy recibe a sus huéspedes. Para la inmensa mayoría de los dirigentes y trabajadores del partido que en ese momento se encontraban en Génova, la cita entre el líder del PP y Brufau pasó completamente inadvertida.

El primer ejecutivo de la petrolera española, estrechamente vinculado al ex presidente de la Generalitat José Montilla y al PSC -pero distanciado de Zapatero y enfrentado al ministro de Industria, Miguel Sebastián-, "está haciendo grandes esfuerzos por acercarse a Rajoy", según admiten fuentes de la dirección de Repsol. El pasado día 3, Brufau asistió a la conferencia que el líder de la oposición pronunció ante el Círculo de Economía en Sitges (Barcelona); y no sólo eso: su equipo hizo las gestiones necesarias -y finalmente logró su objetivo- para que ocupara un asiento junto a la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez Camacho, y muy cerca del propio Rajoy.

Emprendedores y 'pymes'