El Gobierno recupera su discurso más duro con ETA para contrarrestar al PP

Las palabras las carga el diablo, y a la coalición electoral Bildu (EA, Alternativa e independientes)  le estallaron el sábado en la cara al calificar de “incidente” el tiroteo entre dos etarras y un grupo de gendarmes franceses, uno de los cuales resultó herido. José Luis Rodríguez Zapatero, presidente del Gobierno, reclamó ayer contundencia a la izquierda abertzale, “se llame como se llame”, para condenar a ETA. Un mensaje de firmeza que ratificaron otros miembros de los ejecutivos central y vasco para contrarrestar las acusaciones de tibieza del PP, que ha recuperado la lucha antiterrorista como arma electoral.

Zapatero fue claro: “No valen palabras a medias, no valen disculpas ni justificaciones, hay que ser contundente en el rechazo a la violencia, y espero que los pasos que algunos parece que quieren dar sean mucho más profundos, eso es lo que esperamos todos, se llame como se llamen”. Horas antes, Alfredo Pérez Rubalcaba, vicepresidente primero y ministro del Interior, aprovechó la reunión de ministro del Interior de la Unión Europea (UE) de ayer en Luxemburgo para dejar claro que el Gobierno hará todo lo posible para que Bildu no concurra a las elecciones municipales y forales del próximo 22 de mayo si se demuestra que es el plan B de la izquierda abertzale para concurrir a los comicios tras la no inscripción de Sortu en el Registro de Partidos Políticos. “No deja de ser un sarcasmo –dijo el ministro- llamar incidente a lo que es un intento de asesinato de un gendarme”.

El lehendakari Patxi López refrendó sus palabras y, como el presidente del Gobierno, reclamó a Bildu más contundencia. “Un tiroteo no es un incidente, es un tiroteo, es un acto de violencia por parte de una organización terrorista –dijo-. La interpretación es más fácil, se está de acuerdo o no, se condena o no”. También el Ejecutivo vasco reclamó, en este caso a Sortu, que cumpla su compromiso de rechazar toda la violencia de ETA y se pronuncie con contundencia sobre lo ocurrido.

Desconcierto en la izquierda abertzale.

El tiroteo pilló a Bildu con el paso cambiado al encontrarse con un escenario que no contaba el mismo día en que presentaba sus candidaturas electorales. La ambigüedad de la reacción y las críticas del resto de partidos a la misma obligó a Pello Urizar, secretario general de EA; Oskar Matute, líder de Alternatiba, y Mertxe Aizpurua, independiente, a comparecer en público para reafirmar el “rechazo” de la coalición (el mismo término que recogen los estatutos de Sortu para condenar los atentados de ETA) a lo ocurrido y criticar que sea utilizado para poner bajo sospecha a Bildu.

“Denunciaremos todo lo que vaya en contra y ponga trabas al proceso de normalización y pacificación”, afirmó el líder de EA, la formación que más se juega en el envite electoral. También la izquierda abertzale hizo ayer público un comunicado, más contundente que el de Bildu, en el que califica de “sumamente grave” e “inaceptable” lo ocurrido, y recuerda a ETA que los compromisos que ha adquirido con el alto el fuego “no son, en absoluto, compatibles con el tiroteo, siendo incomprensible e inaceptable lo acontecido”. 

Los promotores de Sortu guardaron silencio, a la espera de que el próximo jueves la Sala del 61 del Tribunal Supremo, que denegó su inscripción como partido, aborde si admite o no a trámite el incidente de nulidad planteado por la defensa al considerar que ha vulnerado el derecho a la libre creación de un partido político. Aunque es previsible que los magistrados rechacen el incidente, es un trámite previo obligado para presentar el recurso de reforma ante el Tribunal Constitucional.

Los etarras Itziar Moreno y Oier Gómez, que consiguieron escapar tras dejar herido al gendarme, fueron detenido el domingo y ayer permanecían en la comisaría de Limoges a la espera de ser puestos a disposición judicial. La Policía gala dispone de un plazo de 96 horas para ello.