Ernest Maragall (PSC) plantea un gobierno de coalición en Madrid entre PSOE y los socialistas catalanes

El consejero de Educación de la Generalitat de Cataluña, Ernest Maragall, planteó este martes, en un artículo publicado por El País, la posibilidad de un gobierno de coalición en la Moncloa entre PSOE y PSC. Además, el hermano del ex presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, también puso en entredicho una posible sentencia negativa del Tribunal Constitucional sobre el Estatuto de autonomía de dicha comunidad autónoma.

En dicho análisis, titulado “Construir Cataluña”, Maragall habla de “un mapa que incluya al PSC definido como el gran partido del catalaismo progresista, capaz de articular alianzas estables y federales con un partido socialista español […] una alianza que incluya un mínimo pero sólido acuerdo sobre qué quiere decir España y qué quiere decir Cataluña. En términos de política española actual, esta relación podría plasmarse más gráficamente por medio de un gobierno de coalición PSOE-PSC”.

Hay que recordar que de los 169 escaños de los que dispone el Partido Socialista en el Congreso, 25 son aportados por los resultados del PSC en Cataluña. Dicha opción permitiría a los socialistas catalanes disponer de un portavoz en la cámara baja y de un grupo parlamentario.

Reticencias al Tribunal Constitucional

El consejero de Educación catalán aprovechó su tribuna para criticar un posible pronunciamiento negativo del Constitucional sobre el Estatuto de Cataluña. “¿Por qué concedemos tanta significación a la famosa y temida sentencia del tribunal Constitucional?”, indica Maragall, que agrega que el estatuto “está confirmado por la única voz indiscutible e incontestable: la voz de los ciudadanos refrendando el acuerdo entre los Parlamentos catalán y español”.

Maragall califica al Constitucional como “un grupo de ciudadanos tan sabios” y se preguntan si pueden añadir al Estatuto “amenazas de posibles legislaciones españolas invasoras o negadoras del pacto estatuario”.

Defendiendo el respeto al Estatuto y a la Constitución, plantea la posibilidad de “una gran manifestación”, siempre que nazca desde una determinación “colectiva” y “unitaria” y que venga convocada desde la Generalitat, con su presidente a la cabeza “contando con la presencia de todas las fuerzas políticas catalanas y de todas las instituciones”.

“¿Y nos debemos quedar atados de pies y manos esperando atemorizados lo que una docena de juristas puedan decidir por nosotros? De ninguna manera”, afirma Maragall en dicho artículo.