Éxito de los socialistas catalanes, batacazo de ERC e inestabilidad para el tripartito

Los socialistas han conseguido en Cataluña un resultado que supera sus propias previsiones y al que Zapatero le debe una parte importante de su victoria. El PSC, de hecho, ha conseguido pasar de 21 a 25 diputados, cuatro actas más de las que obtuvieron en sus buenas elecciones de 2004. Los socialistas han ganado en las cuatro circunscripciones y suman más escaños que todos los demás partidos.

El PP ha mejorado un escaño, pasando de 6 a 7. No parece a priori un gran resultado, ya que los 6 escaños conseguidos en los anteriores comicios era una de las peores marcas que nunca habían tenido los populares.

El gran derrotado de esta noche electoral ha sido ERC, que pasa de 8 a 3, muy por debajo de sus expectativas que las habían situado en los 5 que les hubiera permitido mantener el grupo parlamentario propio. Han perdido 430.000 votos, quedándose en 300.000. Su presidente, Josep Lluís Carod Rovira, ha reconocido el fracaso y lo ha achacado a que una parte de su electorado anterior ha optado o bien por la abstención o por votar a los socialistas al considerarles una opción más útil en esta legislatura.

Buenos resultados para CiU

Los malos resultados cosechados por el partido independentista auguran algunos problemas de estabilidad en el tripartito en el que participan. La lucha por el poder entre su presidente y el secretario general, Joan Puigcercós, probablemente se recrudecerá y el Congreso extraordinario que deben celebrar después del verano se convertirá desde mañana mismo en su principal cita.

Los nacionalistas de CiU mantienen sus 10 escaños, un buen resultado en una campaña tan polarizada, pero que no deja de ser uno de sus registros más bajos. Los 10 escaños, además, no les hacen imprescindibles, lo que constituía su objetivo en estas elecciones.

Iniciativa consigue 2 diputados y mantiene la cara, sobretodo si se compara con lo que ha logrado Izquierda Unida.