Culebrón Bono: El ex ministro dice que no será candidato del PSOE a la alcaldía de Madrid

El ex ministro de Defensa José Bono ha decidido no ser candidato del PSOE a la alcaldía de Madrid, según señalaron fuentes socialistas a Efe. Bono mantiene su decisión de permanecer alejado de la vida política, que adoptó en abril pasado cuando dimitió como ministro de Defensa, y que reiteró hace unos meses al PSOE, cuando su nombre sonó como posible candidato, añadieron las fuentes.

Los socialistas se han dedicado las últimas veinticuatro horas a jugar al gato y al ratón. Ayer, el ex ministro de Defensa José Bono dejó ayer abierta la posibilidad de ser el candidato del PSOE a la alcaldía de Madrid, a pesar de que hasta entonces lo había negado de forma tajante. A partir de ahí comenzó un culebrón de declaraciones y desmentidos. Y, mientras tanto, los socialistas madrileños siguen sin cabeza de lista para las elecciones municipales.

En un santiamén, el ex ministro pasó del no rotundo al es posible. Primero fueron las declaraciones de Bono, después se filtró que el PSOE le iba a solicitar oficialmente que aceptara el puesto, más tarde la órbita de José Blanco, secretario de Organización, negaba a este diario que fuera a ocurrir tal circunstancia, “al menos en las próximas horas”... Y así hasta que cayó la noche, con el desconcierto todavía presidiendo el ambiente.

Si Bono quería crear expectación o dejarse querer a cuenta de su posible regreso a la política activa, está claro que lo ha conseguido a la vista del impacto mediático causado por el enredo desatado ayer. Y si lo que pretende la dirección del PSOE y su secretario general, José Luis Rodríguez Zapatero, es presionarle para que acepte la candidatura también parece que la operación puede resultar exitosa, dado el aparente giro dado por Bono en escasas horas.

En fuentes de la órbita de Bono se insistía el martes en que el ex ministro no va a aceptar ser el próximo candidato del PSOE por Madrid, a pesar de las presiones recibidas por Moncloa y Ferraz. Es más, dichas fuentes aseguraron a este diario que acudiría ayer al Círculo de Bellas Artes, donde tenía previsto presentar un libro, y aprovecharía la ocasión para desmentir que fuera a aceptar el puesto. El objetivo: pinchar el globo de las presiones que recibía a través de la prensa. El ex ministro y ex presidente de Castilla-La Mancha consideraba que no han cambiado las circunstancias que le llevaron a retirarse. Así se reflejó en la edición de ayer de El Confidencial.

Pero, cuando llegó al Círculo de Bellas Artes, ni afirmó ni desmintió que fuera a aceptar ser el candidato. Es más, Bono utilizó expresiones que, por primera vez desde septiembre, dejaban abierta la puerta a la posibilidad de que podría aceptar el puesto. Aunque también dijo lo contrario. Como cuando aseguró que le “agradaba” que el partido se acordara de él porque “a nadie le amargan los dulces” y, al mismo tiempo, proclamó: “Quiero estar en una segunda línea”.

Pero algo dejó claro: su sometimiento a la disciplina del partido. Por si había dudas, Bono sostuvo que el presidente “cuenta no sólo con mi subordinación como socialista sino con mi afecto y consideración”. En suma, que queda a disposición de lo que decida el PSOE. Y Zapatero quiere que sea el candidato.

Enredo y aceptación con “pistola en el pecho”

Cuando se filtró a la agencia Servimedia que Bono había aceptado ser el candidato por Madrid, en fuentes de su entorno se insistía a este diario en que el ex ministro no aceptará el cargo: “Si dentro de tres meses le pusieran una pistola en el pecho, entonces se lo pensaría, pero hoy por hoy no quiere ser candidato”.