Bono mantiene la incertidumbre: no dice ni sí ni no a su candidatura a la alcaldía de Madrid

El ex ministro de Defensa José Bono optó este mediodía por mantener la incertidumbre sobre si acepta o no ser el cabeza de lista del PSM a la alcaldía de Madrid. No dijo ni que sí ni que no respecto a esa posibilidad porque son decisiones de su partido que él no quiere “ni adelantarlas ni alimentar ningún tipo de especie” que, agregó, él no ha promovido.

De hecho, a pesar de algunas informaciones aparecidas hoy, en las que se aseguraba que Bono habría dicho "sí" a la propuesta de Zapatero, El Confidencial está en condiciones de asegurar de fuentes directas que el ex ministro no ha tomado aún ninguna decisión, y que está más cerca del "no" que del "sí".

A su llegada a la presentación de un libro en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, Bono recordó que hace seis meses tomó la decisión de dejar la primera línea política “con la conformidad y el beneplácito” del presidente del Gobierno y que, ahora, escucha las propuestas “que se hacen utilizando mi nombre” como candidato socialista a la alcaldía de Madrid.

“Me agrada, no me amargan los dulces –añadió el ex ministro-, pero esa es una decisión sobre la que hoy no me voy a pronunciar, porque quien tiene que tomarla es, en primer lugar, el partido. Y el partido sabe que yo quiero estar en una segunda línea, sabe que soy militante del partido y el partido tendrá que tomar las decisiones oportunas”.

José Bono proclamó su disciplina partidaria y se negó a revelar sus recientes conversaciones con José Luis Rodríguez Zapatero en torno a esta cuestión. “El presidente del Gobierno cuenta no sólo con mi subordinación como socialista, sino con mi afecto y mi consideración”. A su juicio, es el presidente el que debe desvelar el contenido de tales encuentros.

En dos ocasiones, el también ex presidente de Castilla-La Mancha proclamó que tiene “noticias y no sólo deseos” que avalan que el próximo alcalde de Madrid será socialista.

Presiones del PSOE

Bono está recibiendo fuertes presiones del PSOE para que acepte el puesto. Diversas fuentes aseguran a este diario que el ex ministro ha trasladado a Zapatero y a Blanco que “no han cambiado ninguna de las circunstancias” por las que se marchó de la política hace seis meses. Ni las causas personales que ocasionaron su dimisión, ni tampoco las políticas -que él nunca ha reconocido-, centradas en el Estatuto catalán.

Las fuentes consultadas insisten en que Zapatero quiere recuperar al ex ministro para la política activa. La presión se incrementó ayer tras la publicación en El País y El Periódico de Cataluña de que el presidente apuesta por Bono para la alcaldía de Madrid.

La difusión de esta noticia se produce dos días después de que se hiciera público el malestar suscitado en el seno del PSM por la ausencia de candidato. Trescientos militantes del sector guerrista en su mayoría se reunieron el sábado en la Casa del Pueblo de Vallecas (Madrid) para escuchar a José Acosta, su líder natural, quien llegó a decir que era “increíble” que no tuvieran aún un cabeza de lista a la alcaldía de Madrid.

El malestar entre los socialistas madrileños es creciente, debido a que la dirección del partido no abre el cauce para elegir el candidato ni desvela el nombre que desea el aparato, con el todopoderoso Zapatero a la cabeza. Las bases comienzan a creer que la dirección no les tiene en cuenta, después de que el 6 de septiembre el presidente retirara a Trinidad Jiménez de esta carrera y le creara, ad hoc, un nuevo destino político: la secretaría de Estado para Iberoamérica.

¿Y si es Borrell?