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España aumentará el contingente militar desplegado en Afganistán con otros 500 soldados
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España aumentará el contingente militar desplegado en Afganistán con otros 500 soldados

El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero deberá ampliar, por segunda vez en un año, el contingente militar desplegado en Afganistán para hacer frente al terrorismo,

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España aumentará el contingente militar desplegado en Afganistán con otros 500 soldados

El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero deberá ampliar, por segunda vez en un año, el contingente militar desplegado en Afganistán para hacer frente al terrorismo, según establece el plan de la OTAN, que encabeza la Fuerza Internacional de Asistencia y Seguridad (ISAF) y que cuenta con 8.000 soldados, de los que 790 son españoles. La ampliación se producirá en otoño y el objetivo de la misma consiste en “sellar” la zona pacificada y separarla del sur del país, donde todavía luchan los talibanes y Al Qaeda contra las tropas estadounidenses.

La opción de dividir Afganistán y trazar una “frontera segura” entre las cuatro provincias pacificadas -incluida Kabul- y la zona de guerra, requerirá un despliegue mayor del existente hasta ahora. Dicha opción ha sido apoyada por España como la vía más eficaz para evitar la desestabilización y el terrorismo en la zona de reconstrucción. “Aun así, se nos colarán talibanes”, explica un responsable del Mando de Operaciones español.

Los informes de los servicios de inteligencia militar en la zona de Herat y Farah, en la que operan los militares españoles, son inquietantes, y reflejan un “aumento progresivo” de la actividad terrorista, con emboscadas y minas como la que el 8 de julio pasado costó la vida al soldado Arnaldo Hernández Seminario e hirió a otros cuatro que, ya restablecidos, se reincorporarán la próxima semana a su unidad en Herat.

Los esfuerzos de los miembros del Regimiento de Inteligencia Número 1, con sede en Valencia, por persuadir a los jefes tribales de la utilidad de la presencia militar española, en el marco de ISAF, para proteger las tareas de reconstrucción, no han evitado las alianzas bajo mano entre algunos jefes pastunes y los talibanes, y una hostilidad creciente hacia los militares extranjeros, con el consiguiente incremento de atentados y emboscadas.

Alonso evita dar explicaciones en el Congreso

Aunque el ministro de Defensa José Antonio Alonso ha reconocido que “estamos ante una situación de riesgo significativo”, ha evitado acudir al Congreso a explicar el último ataque a un convoy español, porque ello le hubiera obligado a hablar de los nuevos planes para prevenir y combatir el terrorismo y, consiguientemente, la previsión de enviar más soldados. Alonso comparecerá en septiembre y deberá solicitar el permiso del Parlamento para ampliar el contingente.

El ministro confía en que Canadá, Reino Unido y Holanda asuman el mayor esfuerzo de la ampliación, pero con todo, los militares consultados prevén el envío de otros 500 soldados. El Gobierno ya aumentó el contingente en mayo pasado con una compañía de seguridad compuesta por 129 legionarios y veinte blindados medios sobre ruedas (BMR).

El Gobierno asumió hace un año los cometidos de reconstrucción de la provincia de Bagdis y de apoyo a los contingentes de otros países desde la base avanzada de Herat. Desde entonces, doscientos militares protegen las obras civiles en Kala-i-Naw, donde se han invertido 10 millones de euros de un total de 150 comprometidos, y otros 400 soldados actúan desde la base de Herat. Los planes de ISAF pasan por avanzar hacia el sur y fijar la mencionada frontera interior.

El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero deberá ampliar, por segunda vez en un año, el contingente militar desplegado en Afganistán para hacer frente al terrorismo, según establece el plan de la OTAN, que encabeza la Fuerza Internacional de Asistencia y Seguridad (ISAF) y que cuenta con 8.000 soldados, de los que 790 son españoles. La ampliación se producirá en otoño y el objetivo de la misma consiste en “sellar” la zona pacificada y separarla del sur del país, donde todavía luchan los talibanes y Al Qaeda contra las tropas estadounidenses.