Es noticia
Fuerte 'bronca' de una hora entre Mou y los jugadores, a los que acusa de no defenderle
  1. Deportes
  2. Fútbol
LA PÉRDIDA DE IMAGEN PASA FACTURA ENTRE LOS DIRIGENTES DEL REAL MADRID

Fuerte 'bronca' de una hora entre Mou y los jugadores, a los que acusa de no defenderle

Crece la preocupación. La pérdida de imagen a nivel global ha hecho saltar las alarmas en el Santiago Bernabéu. Florentino Pérez siempre ha pretendido cuidar al máximo los

Foto: Fuerte 'bronca' de una hora entre Mou y los jugadores, a los que acusa de no defenderle
Fuerte 'bronca' de una hora entre Mou y los jugadores, a los que acusa de no defenderle

Crece la preocupación. La pérdida de imagen a nivel global ha hecho saltar las alarmas en el Santiago Bernabéu. Florentino Pérez siempre ha pretendido cuidar al máximo los detalles, especialmente los que pudieran influir en lo que se proyectaba hacia el exterior tanto en lo que respecta al equipo como al club, pero ha comprobado que todo lo sucedido en la noche del miércoles en el terreno de juego ha distorsionado y dañado la imagen del Real Madrid en todo el mundo. Mientras, en Valdebebas, Jose Mourinho, además de hablar con Pepe y poner orden a la situación a su manera, ha dedicado gran parte de su tiempo a buscar al filtrador de la noticia de la recaída de Di María y que desveló el diario Marca. Aunque la gran sorpresa la reservaba para el entrenamiento de este viernes.

Mourinho y la plantilla blanca, junto a los utileros y a los empleados de la entidad que conviven día a día con el equipo, tuvieron una fuerte discusión durante más de una hora, en la que ambas partes expusieron su punto de vista. El técnico luso acusó a los jugadores de no defenderle en la zona mixta al término del partido, mientras que la plantilla asegura que Mou ha destruido la unión del vestuario, al dar la cara por el trabajo de Pepe y de los portugueses y dar un 'toque' de atencíon al resto de jugadores. Lo cierto es que entre Mou y la plantilla existe una situación muy tensa, una relación muy deteriorada que no pinta nada bien.

No ha hecho falta una reunión de la directiva blanca para analizar al detalle el momento de la entidad madridista. Las llamadas se han sucedido y la reunión del Comité de Dirección de la mañana de ayer han servido para tomar el pulso al estado del club tras lo vivido el día del Clásico copero. El primer diagnóstico fue el de sentirse perdedores de la batalla mediática en España. Por el Bernabéu considera que esa guerra la tienen perdida por el momento. Piensan que las críticas se suavizan cuando se habla del Barcelona, mientras que la ira crece cuando se enjuicia cualquier circunstancia que sucede en el Real Madrid, algo con lo que saben convivir y no preocupa en exceso.

Lo que sí ha encendido la alarma es el rechazo exterior. Las criticas recibas desde la Europa futbolística con periódicos como Gazzetta dello Sport o L'Equipe (la noticia más comentada del día de ayer en la web francesa fue la relacionada con Pepe y la entrevista de Zidane en As) al frente duelen al presidente. Los éxitos del Barcelona han apartado al Real Madrid del podio de los títulos pero, según los dirigentes blancos, la simpatía seguía acompañando al equipo madridista, cadena que se rompe cuando la atención la acaparan sucesos como el de Pepe

Mou distanció a la prensa del equipo y Pepe ha hecho el resto

El problema con la prensa extranjera se inicia cuando Mourinho llega al banquillo y en sus primeras decisiones está la de blindar a la plantilla de entrevistas y de apariciones públicas. Lo que antes era un club amable y ejemplo para los medios de comunicación llegados desde fuera pasó a ser uno más de la lista de equipos inaccesibles, al más puro estilo de la Premier o el Calcio. Sin intercambio, las críticas se multiplican. Duela a quien le duela, en muchas ocasiones esa es la realidad de la prensa. 

Lo peor es que los dirigentes de la entidad sabían que iba a pasar algo así, pero nunca esperaban el unánime ataque recibido tras el pisotón de Pepe y menos aún la reacción producida tras el escasamente natural arrepentimiento del portugués de origen brasileño. La decisión de cerrar la puerta a cualquier contacto del equipo con la prensa es de Mourinho y no hay vuelta atrás, al menos por el momento. Florentino Pérez quiere dulcificar la situación pero hasta el final de temporada no hay posibilidad alguna de hacerlo.

En lo deportivo y pese a que los directivos señalan la defensiva actitud y táctica ordenada por el entrenador, también critican el rendimiento ofrecido por algunos jugadores cuando el rival sobre el terreno de juego es el Barcelona. La privilegiada posición liguera ayuda a digerir un poco mejor las continuas derrotas ante el Barcelona, pero no olvidan que Mourinho y jugadores como Cristiano Ronaldo llegaron al Real Madrid para terminar con el dominio azulgrana, algo que está muy lejos de producirse.

En busca del 'topo' blanco

Mourinho se pasó en la mañana del jueves por Valdebebas, tal y como hace todos los días, haya o no entrenamiento de la primera plantilla. Es su lugar de trabajo y allí acude. Lo que sorprendió es que su visita del día después fue aprovechada por el técnico para buscar el origen de la filtración de la lesión de Di María, la misma que le impidió jugar en la ida de los cuartos de la Copa. Y es que el técnico piensa que la prensa es uno de los principales enemigos en su trabajo y todo aquel que facilite su labor no tiene cabida en Valdebebas. Después apareció por el Bernabéu para reunirse con José Ángel Sánchez, director general de la entidad con el fin de analizar lo sucedido.

Es más, el rumor que hay instalado en la plantilla es que alguno de los habituales se caerá de la alineación ante el Athletic. Tal y como adelantó El Confidencial, Pepe no jugará ni ante el conjunto vasco ni el partido de vuelta de la Copa del Rey ante el Barça, y el Real Madrid tiene en mente sancionar al jugador por su acción. Lo cierto es que los jugadores quieren liberarse de algunas de las losas tácticas que no les permite jugar a su aire. Complicado.

Crece la preocupación. La pérdida de imagen a nivel global ha hecho saltar las alarmas en el Santiago Bernabéu. Florentino Pérez siempre ha pretendido cuidar al máximo los detalles, especialmente los que pudieran influir en lo que se proyectaba hacia el exterior tanto en lo que respecta al equipo como al club, pero ha comprobado que todo lo sucedido en la noche del miércoles en el terreno de juego ha distorsionado y dañado la imagen del Real Madrid en todo el mundo. Mientras, en Valdebebas, Jose Mourinho, además de hablar con Pepe y poner orden a la situación a su manera, ha dedicado gran parte de su tiempo a buscar al filtrador de la noticia de la recaída de Di María y que desveló el diario Marca. Aunque la gran sorpresa la reservaba para el entrenamiento de este viernes.