Guardiola siempre tiene razón

La que parecía iba a ser una semana de gloria del fútbol español, algunos han querido ver que ha sido una de las mayores decepciones de la historia. Mentira. Pep Guardiola, analítico siempre, algo que lleva a desesperar en ocasiones, ha sido de los pocos que ha puesto luz en el supuesto conflicto del Balón de Oro y ese sentimiento contra lo español que han querido hacer ver desde foros cada día menos periodísticos y más de grupos de amigos especializados en vender humo. Y eso que ahora está perseguido al máximo.

 

El técnico del Barcelona ha querido reivindicar la gala del pasado lunes como el de una fiesta de La Roja, de la campeona del mundo, esa que cautivó a todos por su juego con Xavi e Iniesta a la cabeza. Pocas veces ha estado más acertado, plenamente compartida. Su lectura, pausada y tras un día de todo lo sucedido, llevó al entrenador a decir que jamás España nunca había estado en una situación semejante, que no es otra que la de ver a seis internacionales de Del Bosque en el once ideal de la FIFA y dos de ellos peleando por el Balón de oro con el mejor del mundo. Guardiola huyó de falsos victimismos y complejos y, pese a que su rostro en la gala no transmitiera esa sensación, se alegró de un triunfo que no considera exclusivo del Barcelona. Certero al máximo.

 

No se engañen y aunque es cierto que internacionalmente no pintamos mucho (véase candidaturas a organizar Juegos Olímpicos y Mundiales) ni Blatter es anti español, ni la FIFA odia a España por no tener letra en el himno. Todo es más fácil, estos premios carecen de rigor alguno por que no atienden a criterios objetivos y sí personales de los que votan. Y muchos de ellos seguro que no han visto ni un partido entero de la Liga española.

 

La condición mediática, empujada en muchas ocasiones por las firmas de ropa deportiva, de Messi y Ronaldo les ponen en ventaja en este tipo de votaciones. Sus jugadas, sus segundos televisivos llegan a todos los rincones del mundo semana tras semana, algo que no ocurre con  la dirección de Xavi (por cierto, ¿qué es eso de que le consideren el mejor constructor del mundo?) o el saber estar en todo momento de Iniesta. Así es el fútbol. No le den más vueltas. El sistema de elección es imperfecto y se está demostrando con la aparición de diferentes capitanes y seleccionadores que afirman haber votado a Xavi y no a Xabi, tal y como refleja lo publicado por FIFA. Hay hasta ocho países los que han denunciado a FIFA por variar su elección. ¿Acaso votaron por teléfono?

 

Hizo bien el entrenador azulgrana en no querer abarcar para el Barça y su cantera la repercusión de los premios. Y es que algunos de estos jugadores que hoy han alcanzado la cima con la conquista del Mundial (Xavi y Puyol) fueron criticados con dureza por la Prensa de Barcelona en 2007. Se llegó a salir su salida del club debido al mal ambiente que existía con jugadores como Deco o Ronaldinho. Incluso se llegó a cuestionar el modelo y La Masía, la que hoy es clave en los éxitos del Barcelona, se llegaba a cuestionar como se hacía con dos de sus emblemas. Hoy esa situación parece imposible de que se repita, pero lo cierto es que no está tan lejos en el tiempo. No lo olviden.