Los equipos 'raquíticos' no ocultan las carencias de España

Transcurridos tres partidos de este Eurobasket, no termina España de encontrar el paso. Pese a lo balsámico de la victoria ante la República Checa, no oculta la España de Orenga las costuras por remendar que ahora mismo exhibe. Sabía el equipo que las bajas de hombres como Pau Gasol o Navarro se iban a notar. A estas sensibles ausencias se añadía la de otros hombres que le añadían músculo en la pintura como Ibaka o Felipe Reyes. Con Marc Gasol como único referente bajo el aro, precisaba Orenga cambiar el molde sin variar la esencia.

Nadie apostó por un cambio de rumbo, máxime cuando en los últimos siete años se han sucedido una tras otra las medallas en los distintos campeonatos. Se hace necesario sin embargo cambiar el registro dentro de ese manual de estilo tan masticado durante tantos años. En tanto en cuanto ha cambiado el material para trabajar se hace imprescindible ampliar las vías que te lleven al éxito. Hoy domingo a partir de las 14:30 horas, un nuevo duelo ante un equipo inferior, Polonia, que ni siquieraes rival para la lucha por la clasificación,debe dejar mejor imagen que la mostrada hasta ahora para ir aumentando la autoestima y seguridad del grupo.

Ahora más que nunca precisa España de jugar bien para sacar los partidosde las rondas decisivas que vendrán, y donde se mediaránante rivalesde mayor enjundia que Croacia o la República Checa. Sin ir más lejos, ante Eslovenia, rival que aspira a pelear por las medallas, España no elevó el nivel de su debut y cayó a la lona ante el mayor ímpetu del equipo anfitrión. Desnortado en defensa el equipo de Orenga ante los eslovenos, se antojaba necesario recuperar vigor ante la República Checa. "La República Checa es un equipo que defiende muy bien y que va fenomenal al rebote. Hemos sabido frenarles y esa gran defensa nos ha dado tranquilidad para poder ganar el partido. Nos hubiera gustado anotar más, pero ha sido un partido trabado", declaraba el seleccionador tras el partido ante los checos. Sin solturaen ataque, Orenga destacó el buen nivel en defensa que les permite, a día de hoy, sacar estos partidos algo embarrados y de colmillo que proponen los rivales ante España. “Me gustaría que hubiéramos marcado 120 puntos, pero hay que ganar anotando cien, cincuenta o los que sean. Teníamos claro que si ellos eran duros, nosotros teníamos que serlo más. Debemos seguir creciendo como equipo y llegar a la siguiente fase habiendo dado otro paso hacia delante”.

Sin poderío en la posición de pívot más allá de la referencia de Marc Gasol, Orenga intenta amoldar a sus jugadores a un juego más veloz que potencie el tiro exterior. Ocurre que cuando el rival te impide correr, como ha sucedido en este comienzo de Eurobasket, le cuesta a España encontrar resquicios para entrar a canasta. “Ofensivamente no estamos bien, nos está costando coger los esquemas, pero esto sigue adelante y mañana hay otro partido”, declaraba Rudy Fernández. “En ataque a lo mejor estamos un poco espesos, sobre todo en el cinco contra cinco estático. Aún hay detalles que pulir", decía Llull.

Evidenciado que esta España, inevitablemente, ha perdido músculo respecto a otras citas, toca acompasar el material del que dispone al estilo innegociable. Ajustados en defensa, debe Orenga agitar el cesto y buscar mayores prestaciones en ataque. Conocida la vía de Marcen el poste bajo, se hace preciso que hombres como Xavi Rey o Víctor Claver den un paso adelante que abra esas vías necesarias para ampliar un libreto que, ausentes los solistas titulares, no termina de asimilar la otra España. Con todo, cabe recordar que siempre fue España de menos a más en las citas internacionales. La historia le respalda.