Hombrados y el Atleti sacian sus sinsabores con un nuevo título de Copa

Las últimas semanas no han sido fáciles para el BM Atlético de Madrid y su capitán José Javier Hombrados. A la dura eliminación en los cuartos de final de la Champions a manos del FC Barcelona se unió la derrota del guardameta en las elecciones a la presidencia de la Real Federación Española de Balonmano (RFEBM), cargo que finalmente ocupará Francisco Blázquez. Mucho habría que hablar acerca del proceso, pero eso es algo que el guardameta colchonero ha querido dejar aparcado lo antes posible, fundamentalmente porque aún sigue en activo y porque, sobre la pista, aún le quedan muchos retos que conquistar.

Uno de ellos lo ha cumplido este fin de semana en Logroño. Olvidado su sueño de presidente del balonmano nacional, 'Jota' ha sido uno de los grandes baluartes para que el equipo dirigido por Talant Dujshebaev haya revalidado el título copero. Ya desde el viernes se vio que el Atlético había llegado a la capital riojana con aires renovados y con la sana intención de tomarse su particular venganza. Se medía, una vez más, al FC Barcelona Intersport, ese rival que le había apartado de la Final Four en la máxima competición continental justo seis días antes. Pero las tornas cambiaron, el aspecto psicológico no hizo mella en los rojiblancos, que fueron superiores al actual campeón de la Liga Asobal y se plantaron de esta forma (28-31) en la final.

Allí esperaba el conjunto anfitrión, un Naturhouse La Rioja que se ha convertido en la auténtica revelación de la temporada. Sobre el papel, demasiada diferencia entre un equipo y otro. El potencial de los colchoneros está a años luz de la mayoría de equipos de la Asobal, entre ellos el de Javier González. Pero los riojanos no lo iban a poner fácil, estaban ante la gran oportunidad de sus vidas y de la historia del club y, además, lo hacían en casa, frente a un público enfervorizado, consciente de la gesta que podría lograr su equipo.

El Palacio de los Deportes de La Rioja presentaba un ambiente espectacular. Quizá por ahí pasaba alguna de las escasas opciones que se le adjudicaban al conjunto local. La presión ambiental podría jugar una baza importante ante el descomunal talento de la plantilla de Dujshebaev. Y Naturhouse se mantuvo en el partido hasta que le duró la gasolina, es decir, hasta el segundo período. El ritmo de partido de los rojiblancos era imposible de sobrellevar para un conjunto local que se diluía cual azucarillo sobre el café. Los goles caían y el calor de la grada ya no era tal, había descendido unos cuantos grados con respecto al primer capítulo de esta película con final feliz para los madrileños y de cierta impotencia para los locales. “Hay que luchar hasta el final, sea cual sea el marcador”, gritaba el técnico del conjunto riojano en uno de los tiempos muertos de la recta final del duelo. Javier González era consciente de la dificultad de la empresa, pero quería mantener la tensión de los suyos hasta el último instante por respeto a las 4.500 personas que llenaban el pabellón y que habían dejado sus gargantas en pos de la ilusión y de un título histórico que finalmente se fue al limbo.

El Atlético de Madrid, por su parte, sumaba goles sin cesar y se acercaba a su segundo título consecutivo en la competición del KO. Y lo hacía con todo merecimiento (28-38), dejando atrás unas semanas complicadas, donde otras dos competiciones (Liga y Champions) se quedaron por el camino, además de las conocidas dificultades económicas que también acechan al proyecto balomanístico en el Atlético de Madrid. La alegría de un título hace olvidar todo, y quedó muy patente en la celebración de jugadores y cuerpo técnico colchoneros en Logroño. Y a Hombrados se le habrá cerrado la puerta de los despachos, pero sobre la pista sigue siendo un auténtico valladar y una pieza fundamental para nuestro balonmano. Ahí seguimos necesitándole. 

Ficha técnica

28.- Naturhouse La Rioja (15+13): Jorge Martínez (p), Petrus (8), Mindegia (1), Víctor Hugo (4), Cuartero (2), Curuvija, Capote (1), Aguinagalde (p), Arrieta (2), Miralles (1), Ajo (1), Tioumentsev (2), Paván (5), Silva (1) y Bozalongo.

38.- Atlético de Madrid (18+20): Hombrados (p), Källman (3), Aguinagalde (8), Jukiewicz (8), Masachs (2), Balic (2), Lazarov (4), Rogne (p), Sánchez (1), Eduard Fernández, Álvaro Ferrer (1), Ángel Romero, David Davis, Cañellas (7) y Gojun (2).

Árbitros: Muro San José y Alfonso Rodríguez. Excluyeron por dos minutos a Petrus (2 veces), Paván y Capote del Naturhouse; y a Källman, Cañellas, Jurkiewicz y Balic, del Atlético de Madrid.

Incidencias: Tres mil ochocientos espectadores en el Palacio de los Deportes de La Rioja. Julen Aguinagalde, del Atlético de Madrid, fue elegido mejor jugador de la final.