Anna Tarrés y el equipo de sincronizada continúan con la guerra abierta

El idilio entre Anna Tarrés y el equipo de natación sincronizada parece no tener fin. La seleccionadora mantiene en estos momentos una guerra abierta con la Federación Española de Natación, presidida por Fernando Carperna, pero además la pasada semana, La Sexta sacaba a la luz un supuesto contrato publicitario que, la todavía seleccionadora, habría impuesto a sus nadadoras para así gestionar sus ingresos. Hasta el momento nadie se ha pronunciado sobre lo sucedido. Días antes de que se conociese esta noticia, Tarrés había pedido a la Federación, ante los Juzgados de lo Social número 2 de Terrasa, 350.000 euros, en concepto de vulneración de sus derechos fundamentales como seleccionadora, no renovación del contrato sin motivo claro y por daños a su imagen, ya que considera que la carta firmada por 15 nadadoras en su contra está relacionada con el ente federativo.  

El ‘caso Anna Tarrés’ se ha vuelto a reabrir. Un contrato publicitario ha sido la causa para que la todavía seleccionadora española se haya vuelto a ver salpicada por la polémica. Las integrantes del combinado nacional Marga Crespí y Andrea Fuentes han sido las encargadas de dar a conocer dicho documento en el que aparecía la cláusula que establecía que todos los ingresos generados por patrocinios, actos publicitarios o participantes en campus a nivel individual tenían que ser gestionados por Tarrés.

Crespí, reconoció a la cadena televisiva que se vieron obligadas a aceptar el contrato. "En esa época estábamos al mando de Anna Tarrés y sabíamos que teníamos que firmarlo y que en caso contrario sufriríamos represalias", declaró. Además, Fuentes reconoció que se vio "un poco forzada a firmar". "Evidentemente firmé porque yo quise; lo que está claro es que son sistemas un poco represivos. Te ves un poco medio forzada a firmar", señaló.

Carpena, solidarizado con las nadadoras

Fernando Carpena no tardó en solidarizarse con las nadadoras que acusaban a Tarrés y pidió a las integrantes del combinado naciones que le explicasen los temores de represalias que han denunciado.: "Sí, tengo conocimiento del contrato, las chicas nos lo mandaron a principios de noviembre. Nos habían dicho que tenían un contrato pero sin detalles, entonces nos lo mandaron a la asesoría jurídica porque lo que quieren es asesoría jurídica para redactar un documento de rescisión. Nuestra asesora ve que es un 'contrato de agencia' a una persona, esa persona tiene que buscar patrocinios para pagar los gastos que se generen... y el remanente lo repartirá Anna Tarrés", apuntó el presidente de la RFEN.

La batalla entre Tarrés y Carpena no termina ahí, el presidente de la Federación ha declarado públicamente su apoyo a las nadadoras: “Si ha habido unas chicas que han sido capaces de decir esto en público me merecen todo el respeto y lo que van a tener es mi apoyo. Pero en cualquier caso lo que quiero es que me aclaren si ha habido más cosas", confesó.

En pleno proceso de juicios, Tarrés continúa sorprendida con lo ocurrido y señala a Carpena como principal responsable de lo hechos y como conocedor de todo lo que ha pasado desde el principio. Mientras, el presidente de la Federación sigue negando cualquier relación con la carta en la que las chicas acusaban a Tarrés y que vio la luz el pasado mes de septiembre: “Juro solemnemente que no tengo nada que ver con la que se ha montado. No tengo nada que ver con la carta" aseguró Carpena. Cierto o no, todo sigue abierto y ya ha llegado a los tribunales.