El Barca arrolló a un rival diezmado por las lesiones (35-26)

El Barcelona Borges, finalista el año pasado, disputará este domingo (19:00 horas) la final de la 34 edición de la Copa del Rey tras imponerse al Portland San Antonio por un contundente 35-26 en un encuentro en el que los navarros, diezmados por las lesiones, no pudieron hacer nada ante el potencial azulgrana. Sin Dominikovic, Nikcevic, Urdiales y Jorgensen, lesionados y con Carlos Ruesga, casi inédito debido a sus problemas de hombro, al igual que Renato Vugrinec, los hombres de Chechu Villaldea poco pudieron hacer ante un rival que fue progresando a medida que el Portland se desfondaba físicamente.

Aunque el técnico catalán, Xavi Pascual, quiso sorprender a Villaldea colocando al pivote Jesper Noddesno en el lado izquierdo de su defensa para parar los lanzamientos de Cristian Malmagro, la sorpresa fue para él porque el Portland se iba por delante en el marcador (1-4, m.8). Rápidamente optó por colocar a Cristian Ugalde en su posición de extremo y a Iker Romero de central en ataque, en principio bien parado por las tres 'torres' navarras -Jorgensen, Juancho Pérez y Nikolic- y el acierto de Tomas Svensson en la portería. El Portland se mantenía en la pelea merced al acierto de Fernando Hernández desde el extremo y el noruego Kristian Kjeling desde el lateral izquierdo.

Con empate a cinco goles (minuto 13), David Barrufet entró por un desacertado Kasper Hivdt y los azulgranas se ponían por delante en el marcador por primera vez (13-12, m. 27) tras un penalti transformado por Albert Rocas. A partir de ese momento, el Barcelona tomó el mando del marcador para no perderlo ya hasta el final, llegando al descanso con un apretado 15-13 para los barcelonistas. El golpe definitivo para el Portland llegaba en los primeros minutos de la segunda mitad merced a contraataques letales de Víctor Tomás y penetraciones de Cristian Ugalde (20-15, m.38). Sólo Kjelling y Malmagro, a ráfagas, presentaban batalla a la defensa barcelonista, pero la efectividad de Iker Romero, Laszlo Nagy y Mikkel Hansen, destrozaba totalmente al Portland (34-23, m.56), que había resistido hasta el límite de sus fuerzas.

El Ciudad Real no da opción al CAI y repite final (29-33)

El BM Ciudad Real, vigente campeón, disputará por segundo año consecutivo la final de la Copa del Rey al imponerse hoy en la primera semifinal del torneo al CAI BM Aragón por 29-33 después de un encuentro en el que los aragoneses sólo pudieron aguantar quince minutos al poderoso equipo de Talant Dujshevaev. Una salida espectacular del CAI Aragón sorprendió al Ciudad Real (3-0, m. 2) aunque poco a poco, la maquinaria de Talant Dujshevaev, que hoy incorporó por vez primera a Rolando Uríos como pivote ofensivo, empezó a carburar, aunque el CAI mantuvo ligeramente la iniciativa (7-6. m. 13).

Después del empate de Uríos (7-7, m.14) llegó la explosión manchega. Arpad Sterbik (10 paradas en la primera mitad) empezó a cortar los lanzamientos aragoneses y la ofensiva del Ciudad Real destrozó la defensa de Kosovac. Ni el cambio del meta francés Yohann Ploquin, muy desacertado, por Pablo Hernández, evitaría un parcial de 0-6 (7-12, m.20). Ni el cambio de defensa de los zaragozanos, de seis-cero a cinco-uno, ni la desesperada entrada del lateral zurdo Iván Stankovic -en una presencia testimonial ya que no se ha recuperado de su lesión- cambió el rumbo del encuentro

Además, con dos goles seguidos del extremo sueco Jonas Källman, el Ciudad Real amplió la ventaja hasta ocho tantos (9-17, m. 27) y sólo las acciones de Hussein Zaki cortarían la racha manchega al descanso (13-18). En la segunda mitad, todo se tradujo a un intercambio de goles aunque el CAI, con Pablo Hernández muy acertado en los primeros minutos, no dejó escaparse al Ciudad Real. Uríos, que realizó un gran partido, mantenía con una amplia ventaja para los manchegos (19-26, m. 47), pero el CAI Aragón sacó fuerzas de flaqueza y Zaki, Antonio Cartón y el sueco Dalibor Doder llegarían a recortar la desventaja (25-28, m. 55), pero los de Dujshebaev mantuvieron su renta hasta el final (29-33).