Decepción española en los 1500 que ganó Lagat

El atleta de origen keniata Bernard Lagat, con ficha de estadounidense, conquistó la medalla de oro en la prueba reina del mediofondo, los 1.500 metros, de los Mundiales de Osaka, por delante de Ramzi y Korir, y con una pobre versión de la triple representación nacional.

Lagat, a sus 32 años, alcanzó la gloria que tantos años le fue esquiva en su labor de lugarteniente del grandísimo Hicham el Guerrouj. El keniata, que adoptó la ciudadanía estadounidense en 2004, ya fue plata en Atenas, y ahora recupera para Estados Unidos una medalla que no disfrutaba desde 1987 con Jim Spivey. Aunque juró la constitución americana en 2004 no se le permitió competir con su nuevo país hace dos años en Helsinki, debido a que el reglamento requiere una espera de tres años con respecto a la última competición con el ex país.

Ahora, Lagat se toma cumplida revancha y demuestra su categoría ante figuras emergentes como su compatriota Alan Webb, en una decepcionante octava plaza, o el jovencísimo keniata Asbel Kiprop, cuarto. Sólo el defensor del título, el marroquí Rashid Ramzi, con ficha qatarí, pudo seguir la estela de Lagat en los últimos sesenta metros para alcanzar la plata mientras que el keniata Shedrack Kebit Korir fue tercero.

Higuero, desaparecido

De los españoles nada se supo porque Arturo Casado, Sergio Gallardo y Juan Carlos Higuero nunca estuvieron en carrera, especialmente los dos últimos. Casado sí se situó dentro del grupo desde la salida, en la que Webb intentó acelerar el ritmo aunque sin excesiva determinación.

En el paso por el 800 el joven Kiprop intensificó la marcha, con Casado bien situado por la cuerda, Gallardo detrás e Higuero, desaparecido, cerrando el grupo. El ritmo convirtió el 1.500 en un 400. Todos debían demostrar entonces sus fuerzas, y los españoles ya no las tenían.

Lagat se abrió en el último cien para superar a los keniatas, al igual que Ramzi para llegar en oro y plata. Por detrás Korir aguantaba el bronce, y los españoles entraban sin opciones, y sin fuelle. Casado, el mejor, fue séptimo, dos puestos peor que hace dos años en Helsinki. Gallardo, duodécimo e Higuero, decimotercero.

El madrileño reconocía que le había faltado "fuelle" y a Gallardo "piernas" mientras que el campeón europeo bajo techo echó la vista atrás y en su conciencia descargó que mentalmente no estaba en óptimas condiciones después de los avatares de las semifinales.

La triple representación nacional se marcha de vacío del 'milqui' y el sucesor de Reyes Estévez como medallista en un Mundial, en Sevilla 1999, deberá esperar dos nuevos años, mientras que la delegación nacional seguirá registrando en el medallero de Osaka sólo dos metales.