Parreira cree que Ronaldo y Roberto Carlos se reservan para el Mundial

El técnico de la selección brasileña de fútbol, Carlos Alberto Parreira, opina que no le preocupa la mala racha que atraviesan algunos jugadores brasileños convocados para el Mundial de Alemania como el portero Dida, los laterales Cafú y Roberto Carlos y los delanteros Ronaldo y Adriano, ya que, según cree, están reservando energías para la Copa del Mundo. "Creo que esos jugadores no están bien porque están guardando energía para la Copa del Mundo", afirmó. Parreira no sólo confía en que Ronaldo brillará en el Mundial de Alemania 2006 sino que espera que el jugador del Real Madrid asuma el papel de líder de su equipo.

Ronaldo "va a hacer una gran Copa del Mundo", dijo Parreira al ser interrogado sobre el actual bajón futbolístico del mejor futbolista del Mundial de 2002, que viene siendo duramente criticado por sus actuaciones irregulares en el Real Madrid.

"El tiene que concentrarse en lo que quiere y ser un gran ejemplo para el grupo. Tiene la responsabilidad de liderar la selección", aseguró el seleccionador en declaraciones que concedió a periodistas tras participar en un evento automovilístico en Sao Paulo.

El técnico recordó que Ronaldo será, en la Copa de Alemania 2006, uno de los jugadores con más experiencia en la selección brasileña, debido a que disputará su cuarto Mundial.

Agregó que las actuales críticas pueden incentivar al delantero del Real Madrid a mejorar para probar que no está acabado.

"Espero que todo esto sirva para motivarlo, ya que tiene mucho que conquistar en esta Copa; puede superar algunos récords. Será una sorpresa para mí si no hace una buena Copa", afirmó.

El entrenador comparó la actual situación del delantero con la que vivió en vísperas de la Copa de Estados Unidos'94 el lateral Branco, cuya convocatoria para la selección fue criticada y terminó convirtiéndose en uno de los jugadores claves para una campaña en la que Brasil conquistó su cuarto título mundial.

Branco se recuperaba en la época de una lesión y la prensa brasileña de la época presionaba a Parreira para que alineara a Roberto Carlos, que ya era una revelación.

"Branco fue convocado por su currículo en 1994. El ya había disputado las Copas de 1986 y 1990. Pese a que no estaba en un buen momento, decidí llevarlo y la decisión fue correctísima. El fue decisivo en el momento necesario", afirmó.