Marion Cotillard se prostituye por el sueño americano

El cine de James Gray siempre ha sido un buen golpe con la mano abierta a Estados Unidos y el sueño americano. Con sutileza e inteligencia el realizador ha cuestionado las normas y la doble moral del país. Quizás por ello nunca haya contado para los grandes premios y reconocimientos de la industria a pesar de la indudable calidad de sus películas.

Lo hizo con su trilogía sobre la mafia y la corrupción (Little Odessa, La otra cara del crimen y La noche es nuestra), pero también en Two Lovers, drama romántico lleno de personajes infieles y familias castradoras.

Tras el giro que supuso esta película, el director se embarcó en su filme más ambicioso, The inmigrant, una disección de la inmigración en los años 20 a Nueva York en busca de una vida mejor. Miles de personas que pronto despertaban de su sueño para darse de bruces con una realidad de calles sucias, mafias y mendicidad.

El título añadido en español (ese ridículo El sueño de Ellis) hace referencia a la isla dónde llegaba toda la inmigración antes de que se les diera el permiso definitivo para entrar al país. Era el último peaje antes de entrar, y allí es donde llegará el personaje de Marion Cotillard, una polaca que verá cómo su hermana es confinada en la isla de Ellis por una tuberculosis y tendrá que trabajar como prostituta para conseguir sacarla de allí.

Su película más ambiciosa es la más evidente en su crítica a los valores americanos, pero también su filme más irregular. Un canto a todos aquellos emigrantes que poblaron la Gran Manzana que supone una gran recreación de la época y el ambiente (con una maravillosa fotografía), pero que queda corto como el drama desgarrado que pretende ser y como reflexión sobre el perdón.

Uno queda hipnotizado por el clasicismo y la elegancia de Gray, pero espera más emoción de una historia que tenía más potencial. Tan perfecta en su concepción como fría en su interior. La planificación del realizador está cuidada hasta el extremo, regalando secuencias como la persecución por las alcantarillas o el preciosísimo plano final, pero no es suficiente para que el espectador entregue su alma a una película que carece precisamente de ella.

Gray vuelve a confiar en su actor fetiche: Joaquin Phoenix, pero por primera vez en su filmografía el realizador cede el protagonismo a una mujer. Marion Cotillard se mete en la piel de Ewa, la inmigrante polaca que hará todo para salvar a su hermana. Con cada papel, la francesa demuestra que es una de las actrices fundamentales de la actualidad. Capaz de expresar con una mirada lo que no son capaces de decir veinte frases de guion.

La sorpresa del reparto es Jeremy Renner, con el personaje más agradecido, pero que demuestra un registro diferente al que nos tiene acostumbrados.

Un filme que decepciona más por las altas expectativas que siempre se depositan en una película de James Gray más que por sus resultados.

El sueño de Ellis (The inmigrant)

Director: James Gray

Duración: 117 minutos

Nacionalidad: EEUU

Género: Drama

Reparto: Marion Cotillard, Joaquin Phoenix, Jeremy Renner, Angela Sarafyan