El Nuevo Teatro de Riga recrea en el Grec la cotidianeidad de cinco abuelos en un piso comunitario

El Nuevo Teatro de Riga (Letonia) lleva al Grec la obra Long Life (larga vida), un montaje sin palabras que se presentará en el Teatro Lliure entre el 5 y el 8 de julio y que refleja un día cualquiera en la vida de cinco ancianos que comparten un apartamento comunitario. Al frente de la compañía estable del teatro público letón, Alvis Hermanis dirigirá en el Grec un montaje hiperrealista para el que se ha reproducido el interior de las estancias que comparten los ancianos, a "la misma escala".

Es un montaje "muy visual, sin palabras, con todas las cosas pequeñas que se encuentran en ese tipo de apartamentos sacadas de gente real y que vive muy sola", ha señalado el director teatral. Los abuelos protagonistas están recreados por jóvenes actores sin maquillaje: Guna Zarina, Baiba Broka, Kaspars Znotins, Girts Krumins y Vilis Daudzin.

Los intérpretes no actúan bajo la luz de los focos teatrales sino con luz ordinaria, la que desprende una lámpara pequeña de habitación. Los apartamentos comunitarios "existen aún y hay muchos en Europa oriental, son los que pertenecieron a personas ricas cuyos propietarios fueron mandados a Siberia o eliminados después de la Revolución y en ellos pasaron a vivir otras familias, una en cada habitación, compartiendo baño", ha explicado Hermanis.

El Nuevo Teatro de Riga actúa en España por primera con una obra que lleva interpretando en unos veinticinco países desde hace más de tres años, que se vio en el Festival Internacional de Edimburgo el año pasado y que obtuvo un premio ruso a la mejor producción extranjera de 2006.

Gatis Bullis firma el sonido de la representación en forma de música antigua, la que se escuchaba en el tiempo de la representación y que interpreta en la calle, cerca del monumento de la Libertad de Riga, un artista callejero. "Hablar de la gente mayor no está de moda, incluso no hay en circulación revistas para gente mayor, sólo para mujeres jóvenes", ha señalado el dramaturgo letón.

Hermanis, de 42 años, cree que la civilización europea cambiará en los próximos treinta años porque "Europa tendrá una sociedad diferente, de gente mayor, de gente retirada, lo que tendrá un impacto importante en la vida, la política y la cultura".

El director teatral ha querido señalar que el espectáculo "no habla de las personas pobres del este europeo, sino de la vejez, que en todas partes es parecida". Sin renunciar al humor, trata con "optimismo" el tema de la vejez, ha añadido a Efe una de las actrices del montaje.

Long Life tendrá una segunda parte que ya se está ensayando y que se estrenará en Berlín el próximo mes de noviembre titulada "El sonido del silencio, el concierto que nunca se hizo", con referencia a la canción de Simon and Garfunkel y al concierto que no se celebró en 1968 en Riga.

Producida por el Festspiel de Berlín, la segunda entrega de Long Life, también sin texto pero con música, recreará la vida de los mismos cinco ancianos cuando eran jóvenes. El dramaturgo de Riga ha explicado que el método de trabajo de su compañía es el de "acciones físicas", inspirado en el creado al final de su vida por Constantin Stanislasky.

En todo caso, el director teatral ha señalado que con su método de trabajo, los intérpretes de la compañía Nuevo Teatro de Riga "nos sentimos casi más antropólogos que artistas, ya que investigamos el comportamiento humano y utilizamos el teatro como instrumento".