La patata, a la pila

La solución definitiva a nuestra crisis está en que no sean sólo los ciudadanos quienes se aprieten el cinturón, sino también el Estado

Por Víctor Alvargonzález2

¡Que viene el 'tapering'!

Esa es la mala noticia. La buena es que, al contrario que en el cuento, este lobo puede ser incluso manso. O no. Esa es la cuestión: de qué humor va a llegar

Ni frío ni calor: cero grados

En época de Felipe González, había un ministro al cual, vaya Ud. a saber por qué, le colgaron el sambenito de que no era muy listo

¿Dónde están los riesgos para las bolsas?

Seguimos siendo alcistas pero, al igual que un buen conductor no pierde de vista el retrovisor, un buen gestor no debe perder nunca de vista los riesgos

Relaxing coffee party

Como en las guerras, hay que aprovechar las treguas para revisar las estrategias. Y para sacar conclusiones. La primera es que ya no estamos solos. Los que pensamos que el mayor problema de España es su clase política, ya sabemos que también es el de Est

¡Hagan su trabajo!

Es lo que puso en su pancarta el hombre de la foto que pueden ver más abajo. Es la reacción espontánea de un funcionario norteamericano ante

Japón y China, las dos caras de la moneda bursátil

“Beijing: tenemos un problema”. No, no es una conversación entre la nave china que llegó recientemente a la luna y su puesto de mando, no. Es lo que pensamos debieron decirle a las autoridades monetarias chinas

Ni a los rentistas dejan ya tranquilos

Cómo es la economía: trabajas toda tu vida para hacerte un patrimonio que te permita vivir tranquilo cuando te jubiles y, cuando menos lo esperas, cambian las cosas

Cómo ganar un 5% 'relativamente seguro'

El día 8 de enero recomendaba comprar deuda española. No veía todavía clara la recuperación, pero sí la recuperación de la credibilidad de nuestro país

Un 3% muy seguro

Normalmente, los españoles compramos lo que los bancos quieren que compremos. Tal es su monopolio del sistema financiero. Lo malo es que lo que le interesa

¿Quién se ha llevado mi pensión?

Con lo de las pensiones estamos como con el queso del famoso libro. Y la mayor enseñanza que se extrae del mismo es que de nada