Dos agentes de la policia australiana se llevan en volandas a un pasajero de un avión de Malasia Airlines. El detenido amenazó con entrar en la cabina del piloto cuando el avión acababa de despegar de Melbourne y se dirigía a Kuala Lumpur. La tripulación, con ayuda del pasaje, inmovilizó al sospechoso, un joven de 25 años y de nacionalidad australiana. El aparato tuvo que dar media vuelta y aterrizó de emergencia en el aeropuerto de Melbourne. La policia investiga lo ocurrido y descarta que se trate de un acto terrorista. Esta compañía, Malasia Airlines, todavía se recupera de dos catástrofes aéreas ocurridas en los últimos años.