El PP espera a la declaración de Bárcenas para plantear más acciones legales contra el extesorero

El Partido Popular sigue sin mover pieza ante el recrudecimiento del caso Bárcenas, ya directamente dirigido contra Mariano Rajoy. La consigna vuelve a ser aguantar el acoso de la oposición y ver cuáles son los siguientes movimientos del extesorero encarcelado. Como ocurrió en el primer envite, en enero pasado, en la dirección se toman su tiempo y descartan cualquier respuesta política o judicial inmediata. Según fuentes del partido, la posible ampliación de la demanda presentada por el PP en respuesta a “las fotocopias de fotocopias” queda a la espera de lo que pueda decir su exgerente el próximo lunes ante el juez Pablo Ruz.

La secretaria general, María Dolores de Cospedal, se ha adelantado, una vez más, a la reacción ante los tribunales del propio partido al ampliar la demanda que presentó en febrero en Toledo contra Bárcenas. El dato más novedoso de las últimas informaciones relaciona a la número dos del PP con un donativo empresarial obtenido en la capital del Tajo que el extesorero le imputa personalmente. Lo que aducen en las citadas fuentes es que el resto, las nuevas anotaciones aparecidas, son las mismas de hace cinco meses y que sólo ha cambiado el color y el medio que las difunde, antes El País, ahora El Mundo.

Con ese argumento, en el Partido Popular justifican que tengan que tomarse su tiempo para estudiar nuevas acciones judiciales, sobre todo hasta ver si Bárcenas ratifica ante el juez las acusaciones de financiación ilegal en el PP y reparto de dinero entre sus dirigentes que recogía El Mundo. El extesorero ya negó en su día que tuviera algo que ver con los papeles que se le atribuían y había difundido en el diario de Prisa a través del abogado Jorge Trías. Ahora, en Génova insisten en que toca comprobar si es cierto el giro en la línea de defensa de su antiguo gerente al verse entre rejas. 

Al margen de las justificaciones oficiosas, algunos dirigentes del PP insisten en que el partido tenía que haber salido en defensa de Rajoy, también por la vía legal, aunque fuera para apostillar la demanda antigua y genérica presentada en su día en nombre de la organización y sin que apareciera el presidente del partido con nombre y apellidos.

“Rajoy ya ha dicho lo que tenía que decir”

En la dirección se agarran a la idea de que el jefe del Gobierno ya dijo lo tenía que decir ante la opinión pública y ante el partido cuando negó rotundamente haber cobrado “en negro” y descartan, de momento, que tenga que repetir explicaciones en público, dado que las acusaciones de ahora son exactamente las mismas de principios de año.

Con esa teoría, el Grupo Popular se enfrenta en la Diputación Permanente del Congreso, órgano de guardia de la Cámara en periodo de vacaciones, a los grupos de la oposición que exigen a Rajoy inmediatas aclaraciones parlamentarias por el caso Bárcenas. En el PP se declaran sorprendidos con la actitud del PSOE y de IU, ya personados directa o indirectamente en la causa contra el ex tesorero, por el hecho de que ahora se inclinen por la vía parlamentaria contra el partido en el Gobierno. El grupo mayoritario asume que se quedará solo a la hora de rechazar la petición del resto de la Cámara.