Botella reestructura su Policía pero salva al inspector jefe, imputado en el Madrid Arena

El ayuntamiento de Madrid ha decidido reestructurar al 90% de los mandos de la Policía Municipal pero se resiste a mover al máximo responsable del Cuerpo, Emilio Monteagudo, a quien el juez instructor del caso Madrid Arena, Eduardo López Palop, ha abierto una investigación aparte por presunta falsedad documental cómo se desencadenó la fatídica noche de Halloween en la que murieron cinco adolescentes aplastadas tras una avalancha.

Enrique Núñez, delegado del Área de Seguridad y Emergencias, ha anunciado este miércoles en el Pleno municipal que los oficiales, subinspectores e inspectores que llevan más de tres años ocupando el mismo puesto tendrán otro destino. Además, el ayuntamiento ha decidido crear diferentes departamentos, como un Comité de Coordinación Operativa, una Subinspección de Coordinación y Actos Públicos y una nueva Unidad de Coordinación e Investigación Judicial, así como la integración de un Gabinete de Apoyo Psicológico dentro de la Subinspección de Formación.

Cabe recordar que Monteagudo atribuyó a la oficial de la Unidad de Moncloa-Aravaca, Cándida Jiménez, todas las culpas sobre el dudoso dispositivo policial que se montó en las inmediaciones del recinto del Arena y por qué no se evitó el botellón que se produjo a las afueras del pabellón y que, según el juez, tiene relación directa con la muerte de las cinco chicas. Según su versión, dio la orden para que el servicio se hiciera “correctamente”, conforme a las normas municipales. Una versión que choca frontalmente con la opinión vertida en los Juzgados de Plaza de Castilla por la propia Jiménez, que desmintió la versión de su superior: “Nunca se pasó a nivel alto de riesgo ni me concedieron más refuerzos”.

Mientras el juez instructor del caso analiza en una pieza independiente si se amañaron papeles para que la labor la Policía Municipal en el caso no quede bajo sospecha, Ana Botella muestra su más absoluto respaldo a Monteagudo, manteniéndolo como inspector jefe cuando cambia todo su departamento. Los cambios respetan la anterior estructura organizativa territorial distribuida en los 21 distritos de la capital, y busca adaptarla a la del Cuerpo Nacional de la Policía. Hay que lograr “una mejor coordinación entre ambos cuerpos”, resume Núñez.