Los aeropuertos no levantan el vuelo: pierden uno de cada diez pasajeros

Los aeropuertos españoles no se llenan ni en verano. Dos meses después de que la ministra de Fomento reconociera abiertamente que preparan un plan de austeridad que permita minimizar el gasto en cada aeródromo, Aena reconoció ayer que entre los 47 aeropuertos españoles transportaron a un 9,2% menos de pasajeros entre enero y julio con respecto al mismo período de 2011. Unas cifras que corrobora la teoría de Ana Pastor: hay que ajustar los horarios de apertura a los vuelos con menos tráfico de pasajeros.

Las mejores marcas en solo un mes las registraron, según Aena, los aeropuertos de Barcelona, Bilbao y Santander, con un 6%, 8,6% y un 16,2% más de personas que en julio de 2011. El aeropuerto de Huesca, que se mantuvo abierto durante todo 2011 con una media de ocho pasajeros diarios, transportó en julio a 414 pasajeros: un 2660% más que en el mismo mes de hace un año. Solo seis aeródromos: Madrid, Barcelona, Palma de Mallorca, Alicante e Ibiza, consiguieron cerrar el mes con la visita de más de un millón de pasajeros.

De los 41 restantes, 25 de ellos ni siquiera llegan a los cien mil. Son los aeropuertos con menos tráfico aéreo que se verán afectados por la medida anticrisis de Fomento: los cuatro de Castilla y León (León, Valladolid, Salamanca, Burgos), otros cuatro andaluces (Almería, Granada, Córdoba y el Helipuerto de Algeciras), dos gallegos (Vigo y La Coruña), La Palma, Zaragoza, Melilla, San Sebastián, Pamplona, El Hierro, Extremadura, el de La Rioja, La Gomera y Vitoria.

Aunque Pastor tiene encima de la mesa las estadísticas, Fomento todavía no baraja la opción de cerrar los aeródromos que arrastran la deuda de 12.000 millones de euros de Aena. La ministra habla de que, por ejemplo, en un aeropuerto que abre de 5.00 horas de la mañana hasta las ocho de la tarde siete días a la semana, se podría pasar a un horario de 15.00 horas a 21.30 horas durante seis días a la semana. Suficiente para atender la demanda y un “mazazo” para los afectados, como denunció Enrique Pedrajas, miembro del comité de empresa del aeropuerto de Granada, un aeródromo que no computa el millón de pasajeros al año y mantiene de forma directa unos 500 puestos de trabajo y más de 3.000 de forma indirecta.

El primer puesto en rutas y en número de pasajeros lo ocupa Barajas. Solo en julio, el aeródromo madrileño operó 33.767 rutas, lo que significa un retroceso del 11,2%, respecto a 2011, seguido de Barcelona-El Prat, con 29.024, un 1,4% más; Palma de Mallorca, con 23.811, un 0,8% menos, y Málaga, con 11.566, un 4,3% menos.

Barajas, en el Top One

Por número de viajeros, por Madrid pasaron un total de 4.532.651 en julio, un 7,5% menos que en julio de 2011; seguido de Barcelona, con 3.824.658, un 6% más; Palma de Mallorca, con 3.435.936, un 1%, más y Málaga, con 1.529.286, un 0,3% más. Aena detalló también que el pasado mes de julio se registró una caída de las operaciones del 6,5%, respecto al mismo mes del 2011, con 200.127 vuelos; así como hubo también un descenso del 2,5% en el número de viajeros que utilizaron las instalaciones, con 22.064.412 pasajeros. Los aeropuertos españoles transportaron en julio más de 55.200 toneladas de mercancías, lo que supone un 3,5% menos que en 2011.

Con estos datos, la balanza del mapa aeroportuario español no se sostiene con el precio tan alto que a España le supone mantener a 26 aeródromos totalmente ruinosos y que, casi todos, podrían disponer de otro vuelo a menos de una hora en coche. El de Castellón, con un coste inicial de 151 millones de euros, está a menos de cien kilómetros del de Manises, en Valencia.

Los planes de reestructuración del Gobierno en los aeropuertos españoles pasan por ajustar los horarios de apertura a los vuelos que reciben en los aeropuertos con menos tráfico de pasajeros. Ana Pastor cifró en 19 el número de aeródromos que reducirán su apertura a menos de la mitad (pasarán de las 2.000 horas que ahora permanecen abiertos a 708), con su consecuente reducción de plantilla de trabajadores y, según los aeródromos perjudicados, la entrada de turistas (204 millones en 2011, el segundo mejor ejercicio de la historia de Aena) podría verse mermada. Sin embargo, la lista definitiva todavía no está pactada.

Fomento pretende incluir otras medidas para adelgazar la enorme deuda del sector, como aumentar un 20% la superficie comercial, incrementar los ingresos a través de los concursos de tiendas libres de impuestos, abrir rutas y subir tasas, incluidas ya en los presupuestos generales de 2012. De momento, el Gobierno deja aparcado el proyecto de imponer peajes en las autovías para cubrir su mantenimiento.