Es noticia
"Pasamos del sexo": 10 cosas que realmente desean los 'singles'
  1. Alma, Corazón, Vida
LAS VENTAJAS DE ESTAR SOLTERO

"Pasamos del sexo": 10 cosas que realmente desean los 'singles'

En nuestra cultura no ha estado bien vista tradicionalmente la soltería a una determinada edad. La sociedad ha atribuido valores negativos a lo que muchas veces

Foto: "Pasamos del sexo": 10 cosas que realmente desean los 'singles'
"Pasamos del sexo": 10 cosas que realmente desean los 'singles'

En nuestra cultura no ha estado bien vista tradicionalmente la soltería a una determinada edad. La sociedad ha atribuido valores negativos a lo que muchas veces es una elección personal y no una consecuencia de haber fracasado por no encontrar pareja estable. Uno de los debates más discutidos sobre los solteros y las solteras tiene que ver con su actividad sexual: ¿realmente tiene más sexo la gente casada? O, mejor dicho, ¿realmente están tan preocupados los solteros por ello? La psicóloga especializada en relaciones Bella De Paulo matiza ambos estereotipos: ni tienen tanto sexo los casados, ni están tan insatisfechos los llamados singles.

De todas formas, hay vida más allá del sexo para las personas solteras. Por si alguna vez alguien se topa con una mente todavía anticuada, De Paulo explica otras diez razones por las que estar, o ser (por definición) soltero, tiene más ventajas de las que pensamos comúnmente.

1. Los solteros valoran mucho más tener un buen trabajo y son más apasionados de su actividad laboral

Para el psicólogo Raúl Padilla este es el debate sobre qué fue antes, ¿la gallina o el huevo? Es complicado saber si una persona no llega a congeniar con nadie porque está embebido en su trabajo, algo “difícil de soportar” según Padilla, o si gracias a su soltería puede permitirse tener un trabajo que le apasione y le puede dedicar más tiempo. Un estudio analizó las preferencias laborales de 700 personas en Estados Unidos a lo largo de varios años. Los resultados mostraron que, a la edad de 26-27 años, las personas casadas tenían como prioridad un trabajo mejor pagado, mientras que para las solteras lo importante era tener uno valioso e interesante. Los expertos hacen, por ende, una relación directa entre el estado civil y la motivación para el empleo.

2. Los singles tienen más amigos íntimos que los casados

El modelo tradicional de pareja es “exclusivo y excluyente”, dice el psicólogo. Si la relación no es muy abierta, el hecho de que haya un amigo íntimo de una parte de la pareja (y no de los dos) es visto como una amenaza para la otra persona, alguien que dinamita su confianza: ¿Qué tiene que hablar mi pareja con nadie que no me lo pueda contar a mí?, es la pregunta común. No estamos hablando de un colega fruto de las relaciones laborales o del gimnasio, sino una amistad per se. El psicólogo añade que es un temor muy común en las parejas: Los cuernos sin sexo dan más miedo que los cuernos con sexo”. Por supuesto, los que disfrutan de su soltería no tienen este problema y pueden elegir a sus confidentes libremente.  

3. Estar casado engorda (a las mujeres más que a los hombres)

El refranero español esconde un dicho tan machista como antiguo que dice De soltera, fina y curiosa, de casada, gorda y asquerosa. En una relación clásica (de nuevo) el cuidado de la belleza ha estado relacionado con la búsqueda de pareja, algo más acusado en mujeres que hombres. La no necesidad de seguir buscando acompañante bajo la sábana hace que relajemos nuestro cuidado estético; en los hombres el engorde matrimonial se debe más a la adopción de una actitud más pasiva y al abandono de la actividad deportiva. Si hablamos de celos, estos llegan incluso a querer “castrar” la belleza de sus mujeres para que los otros machos no se fijen en ellas. Padilla afirma también que esto se da cada vez menos porque las relaciones van cambiando, pero en aquellos que siguen todavía un esquema tradicional se refleja este proceso.

En el caso de los singles no se produce porque están continuamente “en el mercado” y sienten más necesidad de cuidarse, estar y sentirse atractivos.

4.  Los solteros tienen un corazón más sano

Aquí conviene matizar que se trata únicamente de aquellos que siempre han estado solteros. Una investigación estudió la salud coronaria de 9.000 personas de mediana edad a lo largo de ocho años y de los resultados se extrae una lista que relaciona el estado civil con el corpore sano. De mayor a menor, los que tenían un corazón más saludable eran (tanto hombres como mujeres): los siempre solteros, siempre casados, los casados más veces, los viudos y en último lugar los divorciados.El 'siempre soltero' ya tuvo su época fiestera en su juventud

Entre los prejuicios atribuidos a la soltería está el de llevar mala vida: salen mucho de fiesta, abusan del alcohol, trasnochan… Padilla relativiza este aspecto: el “siempre soltero” ya tuvo su época fiestera, y en los 40 se dedica a actividades algo más relajadas. Por otro lado, el que aprovecha para salir a desfogarse sin medida es el soltero divorciado, ese que antes quedaba el último de la lista en salud cardiovascular.

5. La gente soltera hace más ejercicio que la casada

De nuevo los singles lideran el índice, que relaciona en este caso la situación sentimental y la práctica de ejercicio. De Paulo hace referencia a otro estudio sobre el tiempo que pasan los norteamericanos haciendo deporte y tanto solteros como solteras eran los primeros, seguidos de separados, casados y viudos.

Padilla apunta que uno de los factores principales que justifica esto es el tiempo libre de más del que gozan los solteros al no tener que dedicárselo a la pareja.

6. La autosuficiencia y la independencia está mejor valorada por solteros que por casados

Para los singles, la independencia significa evitarse muchos sentimientos negativos. En los casados, declararse independiente lleva adjunto un cierto sentimiento de culpa, salvo si tienes una relación muy abierta.

7. En soltería dedicamos más tiempo a papá y mamá. Los casados tienen que ocuparse también de los suegros

Padilla relaciona este punto de nuevo con el tiempo: “Alguien que está casado tiene cuatro progenitores, mientras que el soltero tiene sólo dos”. El origen radica también en que el matrimonio supone la creación de un núcleo familiar propio, pero una persona soltera (y sin hijos) sigue perteneciendo al de sus padres. El psicólogo desmiente el mito del cuarentón que sigue “aprovechándose” de los servicios de sus ascendientes y considera que lo que existe es “una simbiosis entre el single y sus padres”.

8. Los solteros y solteras cuidan de los demás 

La soltería invita a estar más dispuestos a llevar a cabo actividades de cuidado de personas mayores, enfermas o discapacitadas que los casados, al menos durante tres meses, según un estudio. 

El matrimonio implica consensuar muchas decisionesEl prejuicio del soltero egoísta parece rebatirse en la práctica. De Paulo menciona una encuesta realizada a 9.000 británicos adultos, en la que se formuló la siguiente pregunta: “¿Cuida actualmente o ha cuidado de forma regular alguna vez a alguien enfermo, discapacitado o anciano durante al menos tres meses?” Los solteros lo habían hecho con más frecuencia que los casados, según explica la autora. En realidad, esto tiene mucho que ver con el punto anterior: el cuidado de los padres cuando son mayores recae en muchas ocasiones más en los hijos solteros y sin hijos (que tienen más tiempo libre, en principio) que los que son padres.

9. Los singles quieren pasar más tiempo con sus amigos y vecinos y participa en actividades sociales o voluntariado que los married

Padilla explica que el orden de preferencias en nuestra vida es más fácil de ordenar cuando únicamente tenemos que discutirlo con nosotros mismos. Llegado el momento de consensuar las opciones de ocio o de qué forma participamos en la sociedad con nuestra pareja la cosa se complica, y si alguno no quiere solemos no hacerlo. 

10. Los padres y madres solteros educan igual de bien a sus hijos

No hay nada que confirme que tienen más problemas los niños de solteros que los de casados. Es más, apunta el psicólogo, “cuando es un padre o madre solo se vuelca más en el niño que cuando es una familia considerada normal”. En realidad no es que sean mejores, sino que se detectan antes los problemas. Este aspecto es otro de los que ha cambiando sustancialmente con el tiempo: el 37% de los nacidos en España en 2011 procedían de madre no casada mientras en 1975 la cifra era de sólo un 2%, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).

Sin embargo, hay una razón poderosa por la que perpetuar el sistema tradicional: económicamente sale más caro ser soltero. La vida en pareja casada compensa y las leyes lo favorecen a través de ayudas o simplemente gracias a la declaración de la renta conjunta. Y en los tiempos que vivimos, puede ser más determinante de lo que realmente queramos. 

En nuestra cultura no ha estado bien vista tradicionalmente la soltería a una determinada edad. La sociedad ha atribuido valores negativos a lo que muchas veces es una elección personal y no una consecuencia de haber fracasado por no encontrar pareja estable. Uno de los debates más discutidos sobre los solteros y las solteras tiene que ver con su actividad sexual: ¿realmente tiene más sexo la gente casada? O, mejor dicho, ¿realmente están tan preocupados los solteros por ello? La psicóloga especializada en relaciones Bella De Paulo matiza ambos estereotipos: ni tienen tanto sexo los casados, ni están tan insatisfechos los llamados singles.