Pronto veremos los primeros números demoscópicos y vendrán los giros y los rizos de guion. La derecha española haría bien en librarse de la ansiedad y asumir que la batalla será larga
Llama la atención el comportamiento del entramado de la mayoría parlamentaria ante el caudal de pestilentes informaciones sobre la trama corrupta que se publican cada día
La corriente de celebración y simpatía provocada tras su obscena intervención en sede parlamentaria refleja hasta qué punto está podrido nuestro sistema de valores
¿Podrán los socialistas obtener un resultado que, siendo todavía peor que el peor que nunca tuvieron, sirva al menos para que los nacionalistas puedan gobernar con su apoyo?
Hay tantos tuiteros, columnistas y tertulianos deseosos de agradar el poder que no se puede anticipar cuál será el primero en equiparar, de manera más o menos explícita pero impúdica, al que protesta con el terrorista
Durante las próximas semanas veremos especulaciones, se cruzarán las apuestas sobre el final de esta legislatura, veremos un espectáculo truculento tras otro, pero la legislatura continuará
La izquierda española se está quedando sin librepensadores. Cinco años de sanchismo han bastado para que los intelectuales contemporáneos hayan ido cerrando las maletas
Nos encontramos ante una ambición que, además de la traición y la mentira, necesita generar un ambiente moralmente corrupto para instalarse y expandirse
Cuando ocurre lo que está pasando ahora, el poder político se encuentra frente a un dilema: si acaban con la corrupción, pueden perder el poder, y, si emplean el relato moralmente corrupto, pierden la autoridad
La caída de Ábalos y de los que pueden ir detrás tiene la función de evitar que Sánchez acabe siendo visto por la opinión pública como el 'señor X' de este escándalo
Si comenzamos por respetar la naturaleza de las urnas, si empezamos por recordar lo que de verdad se votaba ayer, lo primero que debe subrayarse es que los gallegos han optado por la continuidad
¿A qué debemos prestar atención en primer lugar? A la temperatura de voto del Partido Popular. Si el PP moviliza a toda su base electoral, la partida se cierra
En la última ocasión, ya destacaron por su labor. Tienen ahora una capacidad competitiva mayor. Lo es por méritos propios y también por los deméritos de los adversarios
Sánchez decidió vestirse con la piel de Puigdemont sin valorar que tomaba una elección irremediable, sin tener en cuenta las consecuencias de su propia elección, pero disponiendo de toda la información
No resulta descabellado preguntarse si nos estamos acercando a otro despliegue electoral sucio. No parece disparatado plantear que los socialistas repitan lo que les funcionó