Ivanka Trump es una de las figuras más poderosas de la Administración Trump, puesto que cuenta con el oído del presidente. Su marido, Jared Kushner, es también asesor presidencial. Hay quien la considera el verdadero poder detrás del trono. De lo que no hay duda es de que en los casi dos meses desde la toma de posesión de Donald Trump, su hija ha demostrado su disposición a influir en la política de su país, bien recibiendo a mandatarios extranjeros (como los primeros ministros de Japón, Shinzo Abe, y Canadá, Justin Trudeau) o participando en reuniones con líderes empresariales y comunitarios. Mientras su madrastra, Melania, no parece demasiado interesada en ejercer de primera dama, es Ivanka quien llena el hueco, sin rehuir los focos y los flashes de los fotógrafos.