Vladimir Putin, presidente de Rusia, nos tiene acostumbrados a las mejores fotografías. Lo mismo le vemos montando en submarino, que haciendo una llave de judo.
Es el presidente más 'animal lover', o por lo menos el que más lo exhibe. Cabalga por Siberia a pecho descubierto, trata de ayudar a las grullas a encontrar su ruta en plena migración, y conoce a los animales típicos de las zonas por las que viaja.
Sus apariciones en momentos estelares, como cuando liberó a un tigre atrapado en una trampa de furtivos, siempre han estado rodeados de polémica y escepticismo.