¿Estás estresado en Semana Santa? Las mejores soluciones
Si el trabajo y las tareas domésticas se comen la mayor parte de tu día, es muy probable que hayas comenzado esta Semana Santa con una
Los estudios han demostrado una y otra vez que el ejercicio es una de las mejores maneras de aliviar la ansiedad y mejorar el estado de ánimo. Los entrenamientos aeróbicos, como correr, nadar, caminar o ir en bicicleta, son tu mejor opción.
Puede que suene a cliché, pero tomarse un tiempo para inhalar y exhalar con calma es una manera excelente de reducir el estrés. Esta respiración abdominal, lenta y profunda, inunda el cerebro con oxígeno, estimula el sistema nervioso y relaja al cuerpo. La técnica puede ayudar a calmarte en tan solo dos minutos.
Piensa en ello: ¿alguna vez has salido de la playa o un jacuzzi con ansiedad? El calor influye directamente en la liberación de serotonina, el neurotransmisor que regula nuestro estado de ánimo. Por esa razón, la gente recurre a la sauna para relajarse y sentirse mejor.
Utiliza esta motivación para salir del sofá de tu casa y salir de excursión. Rodearse de naturaleza ayuda a reducir el estrés acumulado del trabajo: el sonido de un arroyo, el aroma de la tierra o la vista de un oasis verde puede desencadenar una cascada de beneficios en nuestros cuerpos.
Está de moda: concéntrate en tu respiración, tus sensaciones corporales y tus pensamientos. Con solo 30 minutos de meditación puedes reducir los niveles de ansiedad y depresión hasta en un 38%, según un reciente estudio de la Universidad John Hopkins.
Se trata de una de las bebidas más conocidas por sus propiedades curativas. Una taza de manzanilla podría ayudar a calmarte en los momentos de estrés. Actúa como un sedante suave y es de gran ayuda para dormir: posee efectos relajantes en los músculos y también sirve para aliviar trastornos digestivos.
Aprovecha estos días de restaurantes para pedir pescado azul. Los ácidos grasos omega-3 propios del salmón o las sardinas son unos excelentes aliados para nuestra salud. Está demostrado que mejoran los mecanismos de respuesta de nuestro cuerpo ante el estrés, así como la comunicación neurológica.
Escuchar música nos ayuda a liberar tensiones acumuladas y reducir las emociones negativas. Así que, ya sea Beethoven o los Sex Pistols, elige la que te haga sentir bien y reserva un tiempo para escucharla sin distracciones. Además, puede ser un buen complemento para meditar.
Los estudios demuestran que la falta de sueño se asocia con niveles más altos de depresión y ansiedad. Junto con el insomnio, crean un círculo vicioso del que es difícil salir. Aprovecha ahora que no tienes tantas obligaciones para cargar las pilas y duerme las siete u ocho horas recomendadas.
Si lo tuyo es una ansiedad más de tipo social, quizá sea buena idea aprovechar las vacaciones para apuntarse a algún voluntariado. Ayudar a los demás evita que los pensamientos negativos influyan en tus relaciones personales.
Ponte en manos de un profesional y prepárate para aliviar esa tensión muscular (provocada por posturas incorrectas, sobrecargas o periodos prologados de estrés o ansiedad) que no te deja disfrutar de las vacaciones como mereces.
Un estudio reciente de la Universidad de Conneticut asegura que aquellas personas que sufren una deshidratación leve también se sienten más ansiosos. Trata por tanto de beber con mayor regularidad si sientes que los nervios y el estrés le están ganando la partida a la tranquilidad de las vacaciones.
Un multivitamínico puede hacer maravillas en tu estado de ánimo y puede ayudarte a disfrutar de la Semana Santa con energía y motivación. Aunque se tomen con regularidad, es recomendable visitar a tu médico, pues no siempre es necesario acudir a las pastillas.
Si el trabajo y las tareas domésticas se comen la mayor parte de tu día, es muy probable que hayas comenzado esta Semana Santa con una sensación de estrés y agobio nada recomendable para pasar las vacaciones.
Ahora que tienes unos días libres, aprovecha el tiempo para darle la vuelta a esta tensión constante (uno de los principales desencadenantes de la ansiedad y la depresión) y comenzar la próxima jornada laboral con otra cara.
Si quieres mantener la ansiedad a raya, sigue estos métodos -respaldados por la ciencia- que te ayudarán a disfrutar de un merecido descanso primaveral.
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