Las redes sociales destilaban ayer un profundo hastío. El drama político nacional estrenó ayer un nuevo capítulo que culminó con la detención de 51 personas dentro de la operación Púnica. Los ciudadanos no tardaron en recurrir al sentido del humor para combatir la indignación que logró apoderarse por momentos de un público que se declaró estafado por una clase política sin escrúpulos. 

 

 

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