Muchos son los que planifican sus vacaciones hasta el último detalle. Aunque los vuelos y el alojamiento son primordiales, también lo son las visitas a los monumentos. Algunos de ellos tienen larguísimas colas de espera que pueden durar horas y que nos restarían tiempo para visitar otras atracciones turísticas, así que cada vez son más los turistas que reservan entradas o 'tours' para hacer visitas sin esperas.

En 2017, la atracción más reservada del mundo fue la entrada 'Evite las colas: los Museos Vaticanos con San Pedro y la Capilla Sixtina', según la web TripAdvisor. Le siguen el 'tour' en barco por el río Chicago para contemplar de cerca la arquitectura de la ciudad y una excursión a pie por la Roma Antigua y el Coliseo. 

En la lista hay una atracción turística situada en España: la Sagrada Familia. Y, en concreto, su acceso prioritario, que permite no esperar cola. La Torre Eiffel, el 'tour' de Harry Potter en los estudios Warner de Londres, el Empire State Building o un día por la Toscana completan el 'top 10' de las atracciones más reservadas del pasado año.