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15 armas experimentales que fracasaron estrepitosamente

El lanzamiento, hace pocos días, de la MOAB en Afganistán ha vuelto a poner sobre la mesa la tecnología militar que se emplea en los conflictos

¿Quién podía pensar que un arma nuclear que tenía la capacidad de provocar daoñs a sus propios soldados iba a tener éxito? La idea estuvo sobre la mesa y se llegó a probar en el desierto de Nevada, pero el M-28 nunca llegó a funcionar en el campo de combate. Lanzar un arma nuclear, por pequeña que fuera, habría iniciado una escalada entre ambos frentes. 

Este ekranoplano podía alcanzar alturas de hasta 300 metros y estaba concebido para misiones de asalto. Se planeó construir hasta 120 unidades aunque el colapso de la Unión Soviética motivó que sólo se fabricaran unas pocas unidades.

Diseñado para ser un helicóptero con capacidades de sigilo, el Comanche quedó obsoleto cuando los drones entraron en acción. ¿El problema? Que este invento fallido dejó un agujero de 7.000 millones de dólares en las arcas de Estados Unidos.

El jeep volador fue un arma experimental desarrollada por el ejército británico quemezclaba un Willys MB con un rotor pensado para lanzar estos vehículos en pleno campo de combate. 

Este reemplazo de los B-52 era capaz de volar a Mach 3 a más de 20.000 metros pero la entrada en servicio de veloces misiles tierra-aire acabó con un programa que supuso un importante agujero económico al ministerio de Defensa estadounidense.

Si un jeep volador te parece ridículo, espera a ver un tanque con alas. Esa era la idea detrás del Antonov A-40, un carro de combate acoplado a un planeador que era capaz de plantarse en el campo de combate y combatir al enemigo en cuestión de minutos. El proyecto se abandonó por falta de medios económicos.

Este prototipo de cazabombardero alemán nunca llegó a despegar en los últimos compases de la Segunda Guerra Mundial pero estaba previsto que pudiera cargar más de mil kilos de bombas, volar mil millas y alcanzar una velocidad de mil kilómetros por hora. 

El ejército japonés se sacó de la manga en la Segunda Guerra Mundial un submarino capaz de transportar aviones. El I-400 fue el primer en lograrlo y podía transportar tres cazas Seiran armados con bombas o torpedos.

El segundo ekranoplano de esta lista era un vehículo pensado para avanzar sin ser detectado hasta las costas de Estados Unidos y lanzar más de 100 toneladas de misiles nucleares sobre las ciudades de la costa este. La marina rusa lo utilizó como método de transporte durante los años noventa.

Ese cilindro en la parte frontal del avión es un láser montado sobre un Boeing 747. El problema residía en los módulos que proporcionaban la energía suficiente para disparar el láser. Eran tan pesados, que la nave sólo podía cargar con seis unidades. 

Antes de que los 'hoverboards' estuvieran en el imaginario colectivo, el ejército de Estados Unidos hizo pruebas con un vehículo que tenía dos rotores en la bases y que se movía en el plano vertical para que los soldados pudieran disparar desde el aire. Para moverse a los lados, el soldado debía inclinarse. Al final, los militares cancelaron el proyecto debido a su lentitud. 

Este mortero tenía un diámetro de casi un metro (910 milímetros) pero nunca llegó a entrar en funcionamiento. Se construyó para probar armamento antiaéreo y llegó a viajar a Japón para ayudar en una posible invasión de la isla en 1944 pero la rendición del país frustró cualquier plan de dispararlo.

No es una idea de Batman sino del ejército de Estados Unidos. El proyecto X-Ray pretendía poner bombas incendiarias en un puñado de murciélagos para atacar las ciudades japonesas, muchas de ellas formadas por edificios de madera. Aunque las pruebas fueron muy efectivas, la entrada en servicio de la bomba nuclear cambió por completo las normas del juego.

El primer misil balístico de largo alcance es el predecesor de los cohetes modernos. Pese a su capacidad destructiva, la escasa precisión de este arma puso en entredicho su efectividad: se estima que se lanzaron cerca de 3.000 misiles durante la Segunda Guerra Mundial y se estima que causó algo más de 7.000 muertos.

¿Qué hacer para frenar una posible invasión soviética sobre Europa? Según Inglaterra, no había mejor remedio que plantar minas nucleares sobre Alemania para dar un golpe mortal al ejército rojo. El plan, afortunadamente, nunca se llegó a ejecutar.

 

El lanzamiento, hace pocos días, de la MOAB en Afganistán ha vuelto a poner sobre la mesa la tecnología militar que se emplea en los conflictos armados. Tecnología que llega al campo de combate pero que, en ocasiones, no pasa de la mesa de diseño o de algunos prototipos.

El siglo XX fue testigo de un puñado de ideas alocadas que nunca llegaron a cuajar. Desde rifles pensados para lanzar armamento nuclear a pocos kilómetros de distancia hasta tanques que podían alzar el vuelo, cualquier idea podía ser válida en el contexto de la Guerra Fría.

En esta galería repasamos algunos ejemplos de ideas que se adelantaron a su tiempo y no prosperaron y otras que no han logrado afianzarse ya que la llegada de tecnologías más modernas las ha dejado obsoletas. Todo ello sin olvidar la correspondiente dosis de sonrojo que producen algunas de las arriba listadas.

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