Ingeniería en miniatura: los mecanismos más diminutos fabricados por el hombre
Nos fascinan las grandes obras de ingeniería y las máquinas enormes y poderosas, pero tiene el mismo mérito, o mayor, construir pequeños mecanismos que funcionen con
Estos mini robots son capaces de saltar más de un metro de alto, recuperar el equilibrio. La energía sale de una célula fotovoltaica, y la idea es que puedan equiparse con sensores o transmisores para ser distribuidos en zonas afectadas por desastres naturales o guerras donde un robot con ruedas lo tendría más difícil para moverse.
Patelo es un jubilado gallego, mecánico naval de profesión, que lleva más de 12 años fabricando réplicas de motores en miniatura. Realiza todo el proceso a mano y sube a YouTube los vídeos de sus creaciones para animar a los jóvenes a que se interesen por esta profesión.
El fotógrafo Kevin Twomey realizó una serie centrada en las tripas de las calculadoras que se utilizaban en los años 50, mostrando la diferencia de estos mecanismos con los microprocesadores que se utilizan en las calculadoras modernas.
Aunque la mayoría de los relojes actuales son digitales, estas son las tripas de un antiguo reloj.
Una batería más pequeña que modelos anteriores y el doble de RAM que el iPhone 6. Eso fue lo que confirmaron los expertos de iFixit cuando 'destriparon' el teléfono de Apple.
Se trata de un tipo de zócalo electrónico (sistema electromecánico de soporte y conexión eléctrica) instalado en la placa base, que se usa para fijar y conectar el microprocesador, sin soldarlo lo cual permite ser extraído después
Estas cajas funcionan por medio de unos remaches ubicados en un cilindro giratorio o disco que, al alzar y soltar las láminas afinadas de un cepillo o teclado de metal, producen el sonido
Los Kilobost son estos diminutos robots. Pero que su tamaño no te engañe: sus creadores fabricaron 1.024, todo un ejército que se comunica y organiza para realizar tareas en grupo.
Este transistor de microplasma fue diseñado por ingenieros de la Universidad de Utah. Ese punto rosa brillante es el plasma, un gas cargado que conduce electricidad cuando se le aplica un voltaje.
Y hablando de robots minúsculos, estos seguramente se llevan la palma. Se llaman RoboBees (robots abeja) y son capaces de despegar en vertical, mantenerse en el aire y volver a bajar. Fueron creados en el laboratorio de robótica de Harvard.
Bleep Drum es una máquina de percusión para todos los músicos que tiene muy poco espacio en su casa.
Nos fascinan las grandes obras de ingeniería y las máquinas enormes y poderosas, pero tiene el mismo mérito, o mayor, construir pequeños mecanismos que funcionen con precisión y cumplan tareas delicadas.
Desde el exacto mecanismo que hace girar las manecillas de un reloj hasta los delicados 'robots insecto' que se coordinan entre sí para cumplir con su misión, la ingeniería en miniatura está llena de ejemplos minúsculamente espectaculares.
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