A la Cuenca Pérmica también la llaman la Arabia Saudí de Estados Unidos. No se lo dicen por que este remoto espacio en el sur del país tenga mayoría musulmana sino por el oro negro que guardan bajo sus pies y al que cada vez sacan más rentabilidad. Una pequeña región entre Texas y Nuevo México que se ha convertido en la cuenca petrolera más rentable del planeta en los últimos meses.

En sus instalaciones, produce más de 3 millones de barriles al día y es el mayor campo petrolero de todo Estados Unidos. Y no solo se caracteriza por tener grandes yacimientos, pues no son mayores que otros que existen en el mundo, sino por su capacidad ociosa. Es decir, copiando a los miembros de la OPEP, como Arabia Saudí, los productores de esta región producen petróleo cueste el precio que cueste y no se preocupan mucho de bajarlo. 

Eso sí, este grifo abierto también tiene sus problemas, y en este caso es que en los oleoductos que da la cuenca no entra más petróleo. Sus instalaciones no dan abasto para ofrecer todo lo que se le pide y corren el riesgo de colapsar.