El índice actual de contaminación en Pekín, la capital de China, es 16 veces superior al recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Un gran número de expertos ya ha alertado de que dicha situación está afectando gravemente al medio ambiente y a la salud de sus ciudadanos. Los últimos datos apuntan que cada año mueren entre 350 y 500 mil chinos a causa de la contaminación ambiental.

En el año 2003 el gigante asiático comenzó a cobrar, a través del Ministerio de Protección Ambiental, una serie de tasas a las compañías por emitir o verter desechos contaminantes. Sin embargo, a principios de este mes China anunció que duplicará dichas tasas porque hasta ahora han sido poco efectivas.

Uno de los indicadores más alarmantes sostiene que el 60% del agua subterránea en China está demasiado contaminada para poder ser consumida sin un tratamiento previo. Gracias a las siguientes fotografías de Reuters podrán comprobar visualmente hasta qué punto llega la contaminación de las aguas en China.