Los yihadistas del Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS) y las milicias suníes que combaten a su lado siguen ganando terreno en Irak, acercándose a su objetivo de forjar un califato mientras avanzan también hacia la capital del país y hacia los santuarios chiíes del sur. Por ello, los chiíes reaccionan. Milicias armadas del temido Ejército del Mahdi marcharon este fin de semana por las calles de Bagdad, en una exhibición de su fuerza. Son los combatientes leales al clérigo Al Sadr, que en su día lucharon contra Estados Unidos. La movilización ha sido masiva. El país se desliza de nuevo hacia la guerra civil.